Imagen de la entrada principal del Hospital de Manacor. | UH

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Inmaculada Díez Muntaner, directora médica del hospital comarcal de Manacor ha presentado hoy su dimisión alegando motivos personales.

Su renuncia no se hará efectiva hasta dentro de unos días cuando el gerente del centro hospitalario, Rafael Santiso, acepte la dimisión y nombre a un nuevo cargo de confianza para esta importante área de gestión. De este modo, Díez no habrá ostentado la dirección médica del hospital ni un año.

La ya ex directora médica ha rehusado realizar cualquier tipo de declaraciones al respeto pero según ha podido saber este periódico, su decisión podría haber sido motivada por los continuos recortes en materia sanitaria y que, en el caso de Manacor han contado con una contundente oposición de los profesionales.

Quejas de los supervisores de enfermería

La dimisión se ha producido el mismo día que los supervisores de enfermería del hospital de Manacor han remitido una carta al president del Govern, José Ramón Bauzá, en la que rechazan las medidas de recorte que está adoptando el Ejecutivo autonómico, y por eso le piden «colaboración» con todos los colectivos para «establecer y definir líneas de actuación conjuntas» antes de que se tome cualquier «medida de impacto» en la sanidad de la Comunidad.

En la carta, aseguran que algunas de las medidas del Plan de Equilibrio Económico «no se ajustan a la realidad de la sociedad» ya que «no repercuten en todos por igual y no hacen más que disminuir la calidad, la eficiencia y la confianza de la población en la sanidad pública».

Entre dichas medidas ven como un error el aumento de la jornada laboral a 37,5 horas semanales ya que «repercutirá en las plantillas» y hará que «las mismas cargas de trabajo sean asumidas por menos profesionales en detrimento de la calidad de atención».

Respecto al Hospital de Manacor, critican que, con las nuevas medidas, la franja horaria de atención de los casos derivados del Centro de Salud será desde las 17.00 horas, en vez de desde las 21.00 horas por la noche ya que asume sus urgencias, cuando éste permanece cerrado. Según han explicado, esto «aumentará el tiempo de espera y el coste sanitario».

Por otra parte, también se han mostrado en desacuerdo con el cierre del Hospital General y el Joan March ya que «repercutirá de manera negativa en la población». Así, aseguran que son «conscientes de que el presupuesto actual es insuficiente pero creen que «la solución no es reducirlo sino gestionarlo con más eficiencia»

En este sentido han aclarado que no pueden «aceptar algunas de las medidas contempladas en el Plan de Equilibrio Económico» aunque entienden que «la situación económica y financiera «pida a todos un esfuerzo».