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Uno de los concesionarios que explota varios lotes de hamacas y sombrillas en la playa de Can Picafort y parte de la Platja de Muro, Bernat Riutort, denunció ayer ante la Guardia Civil los actos vandálicos que padeció durante la madrugada del lunes en un total 148 hamacas de su propiedad.

Visiblemente molesto con los hechos, Riutort puso de manifiesto el gran gasto que supone cambiar las telas de las hamacas «y todo ocurre justo en el inicio de la temporada turística», apuntó el empresario. El concesionario aseguró ayer que «cada tela de cada hamaca tiene un coste de 22 euros, a los que se debe añadir la mano de obra para cambiarlas».

Durante la mañana de ayer, los operarios de la concesionaria se apresuraron a amontonar las hamacas afectadas por los actos vandálicos y se colocaron piezas antiguas que estaban almacenadas. Cabe destacar que la semana pasada, el mismo concesionario también encontró alrededor de 60 hamacas que también habían padecido daños en la Platja de Muro.

En el año 2007, el mismo concesionario también denunció la aparición de 570 hamacas rajadas en la Platja de Muro.