Imagen del paseo peatonal de la Platja de Palma. | FOTO: PERE BOTA

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El pleno del Ajuntament de Llucmajor aprobó ayer por unanimidad instar al Gobierno de España y a la Conselleria de Turisme del Govern balear a iniciar las negociaciones pertinentes para conseguir la incorporación en los presupuestos generales del Estado las partidas necesarias para continuar con el proyecto de reconversión integral de la Platja de Palma.

La moción presentada por la portavoz del PSM en el Consistorio, Joana Lluïsa Mascaró, obtuvo el apoyo unánime de todos los partidos que integran la Corporación Municipio después de que la portavoz nacionalista tuviese a bien aceptar la propuesta del alcalde Joan Jaume (PP) de eliminar del documento los puntos dos, tres y cuatro, en los que Mascaró cargaba contra el conseller de Turisme, Carlos Delgado, el ministro Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, y pedía la dimisión de Álvaro Gijón como gerente del consorcio de la Platja de Palma.

Críticas

Las críticas del PSM contra Soria y Delgado tenían su origen en el anuncio efectuado por el ministro y el conseller, en la pasada feria internacional de turismo de Berlín, de paralizar sine die el proyecto de reconversión, por constituir «una grave burla a los ciudadanos de Balears, especialmente a los residentes y trabajadores de s'Arenal».

A la formación nacionalista tampoco le gustó que Delgado, «prescindiendo de las competencias de los ayuntamientos de Llucmajor y Palma, del consorcio de la Platja de Palma y del Consell de Mallorca», decidiese «liderar» él personalmente el desarrollo de las propuestas de proyectos privados en la zona mediante la aprobación de decretos ley.

Finalmente, la moción del PSM también pedía la dimisión de Álvaro Gijón, aduciendo que «no ha sido capaz de negociar los fondos públicos del Estado para llevar a cabo un proyecto (el de la rehabilitación de la Platja de Palma) imprescindible para la reactivación económica».

Política

El alcalde acusó al PSM y al PSOE de romper el «consenso» que hasta ahora ha imperado en el proyecto y de querer ahora hacer «política» con la reforma de la Platja de Palma.