Los técnicos del Ajuntament de Capdepera detectaron una serie de deficiencias en el nuevo proyecto de ejecución del hotel Son Moll. Así se informó a la propiedad, s'Entrador SL, que solicitó al alcalde, Rafel Fernández (PSOE), la posibilidad de iniciar las obras mientras se subsanaban deficiencias. Propuesta que fue denegada de inmediato por el Consistorio hasta que la Junta de Gobierno no de el visto bueno.
La petición llegó un día después de que el ex alcalde socialista Bartomeu Alzina declarara como imputado por presunta prevaricación al no detener las obras del antiguo hotel Son Moll, pese a saber que se estaban realizando sin licencia.
Así lo informó el actual alcalde que acogió con sorpresa esta petición. «Es extraño que teniendo este precedente, pidan empezar las obras sin todos los permisos. Tenemos muy claro que se hará cumplir la legalidad. El celador de obras controla que no haya movimientos hasta que todo esté en regla».
Fernández añadió que «la promotora presentó el proyecto de ejecución pero los técnicos detectaron una serie de deficiencias. Será este mismo viernes, cuando el proyecto que ha presentado la propiedad de nuevo se debatirá en Junta de Gobierno y se analizará si todas las deficiencias han sido subsanadas. En principio no habrá ningún problema».
La idea de la propiedad era poder levantar la estructura antes de Semana Santa que es cuando las obras tienen que paralizarse para retomarlas en noviembre y abrir el nuevo establecimiento hotelero en 2013.
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Tampoco seria nada raro que, en función de la entidad de las deficiencias, se autorizase el inicio de las obras, condicionado al cumplimiento de las mismas. Si tiene que ocurrir un accidente, ocurrirá, haya licencia o no. Lo que tienen que hacer es vigilar el cumplimiento de las normas de seguridad en la obra.