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La presidenta del Consell de Mallorca, Maria Salom, aseguró ayer que el proyecto de reconversión de la antigua central eléctrica de Endesa en Alcúdia en un museo para las artes y las ciencias de Mallorca era una «venta de humo» de la anterior administración insular y que por tanto su equipo no planea llegar a ejecutarlo.

El proyecto, impulsado por el Consell de Mallorca en colaboración con el Ajuntament d'Alcúdia, Endesa y la Autoridad Portuaria en 2006 y continuado la legislatura pasada tenía un presupuesto de 23 millones de euros. El diseño, adjudicado a través de un concurso de ideas al arquitecto Miguel Alonso por 80.000 euros contemplaba la transformación del edificio original diseñado por Ramón Vázquez Molezun en 1955, en una inmensa área de recreo ajardinada, con acceso directo al mar que dispondría de diferentes espacios públicos, entre ellos el que sería el Museo de las ciencias y las artes de Mallorca.

Se preveía un acceso desde la calle Enginyer Gabriel Roca que enlazaría la zona deportiva del Port d'Alcúdia con el puerto comercial. Desde la entrada una gran pasarela comunicaría los principales puntos objeto de actuación.

Preguntada sobre la cuestión (era el proyecto estrella de la ex consellera insular de Ordenación del Territorio Maria Lluisa Dubón la legislatura pasada) la presidenta del Consell, Maria Salom dijo ayer: «Se vendió mucho humo y con las posibilidades presupuestarias actuales no está entre nuestros planes desarrollarlo». Salom aseguró que «antes de vender algo hay que tener garantizada la financiación. Hay que vender realidades, afrontar la realidad y encarar el futuro sobre cosas ciertas».

La presidenta del Consell dijo que «el anterior equipo del Consell ya debía conocer las condiciones presupuestarias cuando vendió el proyecto».

El plan especial de reconversión de la vieja central eléctrica debía ser un referente turístico y cultural en el Nord de Mallorca. No sólo recuperaba el degradado edificio industrial diseñado por Vázquez Molezun, arquitecto que recibió en 1992 la medalla de oro de arquitectura, sino que además contemplaba la creación de un espacio singular sin precedentes «en la línea de actuaciones emblemáticas como el Tate Modern en Londres o el edificio Ilgner en Barakaldo». Así lo describió en su día el que fuera ex conseller de Territori del Govern, Gabriel Vicens, durante la presentación del área de reconversión de la vieja central eléctrica en abril de 2006 en Alcanada.