Los operarios han empezado las tareas de instalación mientras los vecinos se quejan. Fotos: G.V. | Gori Vicens

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La finca de Es Pujol, en s'Alqueria Blanca, vuelve a ser motivo de polémica. Si hace unos años lo fue por el proyecto de construcción de un campo de golf, ahora lo vuelve a ser por la instalación de un parque de placas fotovoltaicas.

Estos días, los operarios de la empresa instaladora han comenzado los trabajos de montaje. El terreno ocupado por el parque es de unos 32.000 metros cuadrados y está previsto que acoja unas 5.000 placas.

Los vecinos de los alrededores de esta finca han manifestado su oposición al «impacto visual» que deja la instalación. Algunos de los residentes explicaron que «no estamos en contra de las energías renovables, sino del lugar donde está, ya que este terreno está en una colina y el impacto visual es muy fuerte», apuntaron.

Desinformación

Además, criticaron la falta de información, ya que «nadie nos ha dicho nada, nadie sabe nada, por eso no nos queda más remedio que poner un abogado para que mire cómo está todo», explicaron. Los responsables de la empresa que instala el parque, Wirsol Energía, señalaron que la instalación cuenta con todos los permisos pertinentes por parte de la Conselleria d'Indústria i Energia, desde el año 2008. El proyecto estuvo a exposición pública, y cuenta con el estudio medioambiental pertinente. Se prevé la construcción en la zona unas pantallas vegetales para minimizar el impacto visual.