El Ajuntament prevé que las tareas de desmonte empiecen en pocos días. | Antoni Pol

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Después de años de trámites y reivindicaciones, las antenas que presiden algunos edificios del casco urbano de Binissalem abandonarán el pueblo. El Ajuntament ha llegado a un acuerdo con las principales compañías de telefonía para que las antenas presentes en el pueblo sean sustituidas por una antena más grande que se situará en un solar municipal ubicado en el polígono industrial del pueblo.

La empresa de telefonía Movistar será la encargada de gestionar el servicio de la antena y ya ha llegado a un acuerdo con las otras compañías para su uso. La empresa pagará mensualmente al Consistorio un alquiler de 355 euros más IVA por utilizar cincuenta metros del solar. El acuerdo tiene una duración inicial de quince años que se puede prorrogar.

A los binissalemers les quedan pocos días para ver las antenas dentro del pueblo, porque el Consistorio ya ha otorgado la licencia a la empresa y se prevé que el cambio de emplazamiento sea inminente. Pese a que se retirarán todas las antenas del pueblo, el Ajuntament permitirá que un repetidor de telefonía permanezca dentro el casco urbano, en concreto en la calle Jesús, por si hubiera problemas con la cobertura.

Servicio

En este sentido, el alcalde de Binissalem, Jeroni Salom, explica que «los técnicos recomiendan que el repetidor se quede dentro el municipio porque con la modernización de la telefonía se pueda garantizar el servicio en los próximos años».

Todos los partidos con representación en el Consistorio binissalemer apoyaron el proyecto que se llevó a pleno y se mostraron «muchos satisfechos» de que después de más de cuatro años de reivindicaciones las antenas desaparezcan de las azoteas del municipio. Y es que el pueblo de Binissalem ha pedido en diversas ocasiones su retirada, la más notoria en 2009 cuando una manifestación recorrió las calles del pueblo.