El Auditori de Manacor no puede ponerse en funcionamiento hasta que no esté equipado. | Guillem Mas

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La inauguración del Auditori de Manacor se viene posponiendo desde hace casi seis meses a causa de la necesidad de contar con 600.000 euros para equipamientos de la infraestructura.

Este nuevo espacio escénico, que ha costado unos 6,6 millones de euros y que se ubica en el paseo del Ferrocarril, tendría que haber abierto sus puertas a finales del verano pasado. Pero el retraso en la finalización de unas actuaciones de mejora y la falta de financiación para dotar el edificio son, a día de hoy, las causas del cierre.

El alcalde Antoni Pastor reconoció que el Ajuntament necesita 600.000 euros para poder poner en funcionamiento el Auditori y avanzó que se intentará negociar con la Conselleria de Turisme del Govern, que ha subvencionado gran parte de la obra, una subvención para los equipamientos.

Según Pastor, «a falta de cuatro detalles, el problema principal radica en la falta de financiación para poder estrenar el Auditori». El alcalde confía en poder llegar a un acuerdo con Turisme ya que «es comprensible que necesitemos un empujón más».

El nombre

En el último pleno también se aprobó que finalmente el nombre oficial de la infraestructura sea Auditori de Manacor, descartándose así de una vez por todas la apuesta por Guillem d'Efak. El portavoz de PSM-Esquerra-Verds, Sebastià Gaià, criticó al alcalde Pastor por llevar a pleno una decisión que ya se había tomado hace semanas ya que «en la fachada sur del Auditori ya están las letras colocadas, la verdad es que aunque tengan mayoría es feo que votemos algo que ya es un hecho consumado».

Hay que recordar que las obras se iniciaron a finales de agosto de 2008 y tuvieron que paralizarse un año después por un sobrecoste en el proyecto provocado por la construcción de una sala subterránea de 600 metros cuadrados, la ampliación del telón escénico y la ampliación del número de placas solares, unas actuaciones que no estaban previstas en los planos de obra.

Tras las modificaciones, la Conselleria de Turisme avaló los cambios en el proyecto y su sobrecoste por lo que finalmente las obras se retomaron de nuevo.