Hace cinco años que el Ajuntament de Pollença dictó la primera orden de ejecución pero no ha sido hasta este año cuando ha solicitado el permiso preceptivo a Patrimonio, requisito imprescindible para poder ejecutar dicha orden. Hace más de un año que el Consistorio tuvo que cerrar el camino público que linda con la fábrica debido al peligro de desprendimientos que ponía en riesgo la seguridad de los transeúntes.
Prescripciones
La autorización de Patrimoni, no solo da permiso para ejecutar la orden de reparación (si los propietarios no efectúan las reparaciones el Ajuntament podrá legalmente hacerlo y pasarles factura) sino que además propone una serie de medidas añadidas a la propuesta municipal, con el objetivo de frenar el deterioro al que está sometido el edificio.
Patrimoni ordena así «una poda controlada de la vegetación del jardín situado frente a la fachada principal, la protección de la edificación contra la penetración de agua de lluvia, la revisión de la estructura del edificio para proceder a su apuntalamiento o reparación y el apuntalamiento de los forjados del edificio en dos alturas debido al mal estado que presentan y a los actos de vandalismo a que están sometidos los interiores del edificio», dice el informe.
1 comentario
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Ja era hora ,un lloc tan emblemàtic a l'entrada del poble i tan degradat,a més de ser un edifici preciós que s'ha deixat caure de mala manera.