Los trabajadores llegaron provistos con 'tuppers'.

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Lo que debía ser un tradicional brindis de Navidad se convirtió ayer de nuevo en un enfrentamiento entre los trabajadores de Muro y el alcalde del municipio, Martí Fornés (CDM-PP). Los empleados municipales protestaron, otra vez, por el recorte salarial que aprobó el equipo de gobierno a finales de octubre para paliar una subida ilegal de los sueldos que se acordó por unanimidad ahora hace tres años.

«Como hemos pedido en muchas ocasiones poder reunirnos con el alcalde para negociar con él nuestro contratos y hacerle llegar nuestro malestar y en ningún momento nos ha querido recibir, hemos decidido acudir al brindis navideño para que vea que existimos y que estamos dispuestos a hacer todo el ruido que haga falta», explicó ayer Ricard González, representante sindical de los trabajadores de Muro. Así, alrededor de una veintena de trabajadores, la mayoría miembros de la Policía Local y trabajadores de la residencia municipal, se personaron ayer mediodía en el Ajuntament provistos con un tupper «para poder recoger toda la comida posible y así tener algo que ponernos en la boca durante las fiestas de Navidad», lamentaron.

Protesta

Los trabajadores interrumpieron hasta en tres ocasiones el discurso del alcalde con varios gritos en su contra y fue necesaria la presencia policial para que callaran. En su discurso, el alcalde de Muro hizo referencia sutilmente al conflicto con los trabajadores y aseguró que «gobernar y tomar decisiones no es tarea fácil. Guardando las distancias, dirigir un Consistorio es como ser padre de familia, a veces hay que dar un no por respuesta y es complicado que se acepte». Fornés insistió en que el equipo de gobierno (UM-CDM-PP) «quiere lo mejor para el pueblo y, a veces, las resoluciones pueden no ser agradables pero son las adecuadas para Muro».

Ayer, uno de los protagonistas destacados fue Toni Bestard, policía local de Muro, que actualmente se encuentra de baja por una hemiparesia residual debido a una intervención quirúrgica para combatir un tumor cerebral. Bestard no ha recibido este año cesta de Navidad, como sí lo han hecho el resto de trabajadores y sostiene que es debido a «que se encontraba de baja».

Solidaridad

Ayer sus compañeros no lo dejaron de lado y pidieron al alcalde una cesta para él. Bestard asevera que lleva «desde el 25 de junio del 2009 pidiendo su reincorporación laboral, sin obtener, por el momento, ninguna respuesta».

Los trabajadores de Muro anunciaron que destinarán todas las cestas de Navidad que reciban a una ONG.