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La inauguración del restaurado Molí d'en Beió el pasado octubre con bendición y padrenuestro incluido ha iniciado el debate sobre la necesidad o no de que el Ajuntament de Manacor apueste por un protocolo aconfesional.

El grupo municipal PSM-Esquerra-Verds presentó, en el último pleno, una moción en este sentido. El concejal Joan Llodrà defendió que «desde el punto de vista de un estado aconfesional y moderno este hecho resulta extraño, ya que los actos oficiales del Consistorio se tendrían que evitar casos discriminatorios».

Llodrà entiende, sin embargo, que «el alcalde y los concejales que lo deseen pueden acudir a actos religiosos a los que sean invitados por deferencia, pero que en actos oficiales del Ajuntament se les invite a participar de manera activa no es correcto».


Tradición

«La religión católica en Manacor es mayoritaria pero no la única pero lo más importante es que todas las personas tienen derecho, dentro de un estado aconfesional, de no tener que manifestar en público sus creencias o no creencias. Desde el equipo de gobierno PP-AIPC, así como también desde ALM-UM, se defendió la participación y presencia de los sacerdotes en actos oficiales si se considera que deben ser invitados «ya que creemos que no ofenden a nadie».