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Las entidades europeas European Landowners' Organisation (ELO) y The Rise Foundation, que representan a propietarios y empresarios rurales, critican los pasos dados por el Govern de les Illles y el Consell de Mallorca de cara a la apertura de los caminos de la finca de Planícia. «Los recientes actos amenazan la conservación de la Sierra de Tramuntana dando más importancia a los intereses políticos y económicos a corto plazo que a la protección de la Sierra y su diverso y rico patrimonio natural y cultural», indica.
Estas asociaciones con sede en Bruselas han enviado una carta al presidente del Govern, Francesc Antich, y a los consellers Carles Manera y Gabriel Vicens, así como a la presidenta del Consell, Francina Armengol, y a la consellera insular Marilena Tugores.
En la carta exponen que la ley aprobada por el Parlament el pasado mes de octubre «trasluce una clara voluntad de la administración por apropiarse gratuitamente, declarando que son públicos, de todos los caminos rurales privados de la Sierra de Tramuntana y de Mallorca, sin las debidas previsiones presupuestarias para mantenerlos, regular su acceso y prevenir daños a las propiedades y valores ecológicos de los mismos».
Ayudas
«Es sorprendente», añade, «que la administración no pretenda encauzar y regular un uso público». Y añade: «No hemos visto ninguna posible política de ayudas a estas propiedades emblemáticas, sino solo prohibiciones, restricciones, y limitaciones de derechos e imposición de nuevas obligaciones».
Finalmente consideran contradictorio pedir la declaración de Patrimonio de la Humanidad y «dar más importancia y cobertura a usos y actividades vinculadas al sector turístico y del ocio, como lo es el senderismo y todo lo que implique libre circulación».