Los grupos representados en el Ajuntament debatirán en septiembre el plan de saneamiento. | Lluc Garcia

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En 2020 el Ajuntament de Sóller podría haber superado sus graves problemas actuales y normalizar su situación financiera siempre que cumpla «escrupulosamente» las indicaciones del plan de saneamiento elaborado por la empresa Fornell Consultors, con inicio de aplicación en el presupuesto del presente año.

Según señaló a Ultima Hora el alcalde, Josep Lluis Colom, «será así siempre que se vayan cumpliendo todas las indicaciones del plan, lo que supone una reducción del gasto ordinario y el aumento de los ingresos».

El alcalde avanzó que el plan de saneamiento «ya está en manos de la oposición para su estudio», y que «la primera semana de septiembre se convocará una comisión informativa para debatir su aplicación en los próximos años a partir del presupuesto de 2010 que estamos en vías de aprobar».

Descompensación

Por ahora el Consistorio solleric ha pedido al Catastro una revisión del IBI, al considerar que existe «una descompensación entre los tributos de las casas de nueva construcción y las del casco antiguo», una cuestión que de prosperar derivaría «en una mayor recaudación municipal a partir de 2012 ó 2013».

Al otro lado de la balanza están las perspectivas de los autores del plan, conforme a las cuales Colom deduce que «la privatización de los servicios municipales ocasionará en su día un punto de inflexión, y las recaudaciones que a día de hoy son positivas pasarán a ser negativas».

Hace semanas Colom proporcionó datos «preocupantes» procedentes del informe externo y «que aun se incrementarán según pasa el tiempo». Así, mientras el actual equipo de gobierno ha reconocido una importante deuda de caja -fuera de presupuesto ordinario y para gastos corrientes- entre los años 2004 y 2006, reconoce que aún queda pendiente una partida del mismo tipo posterior «de unos 1,7 millones de euros más, y que fue contraída entre enero y mayo del anterior, año preelectoral».

El plan de saneamiento que ha preparado la consultora externa también incluye recortes salariales para reducir los gastos ordinarios, cosa que el alcalde interpreta «incluida ya por impositivo legal» en el decreto de medidas extraordinarias del Gobierno, a salvo de «alguna concreción».