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Seis años después del accidente que tuvo lugar en la carrera de 'carretons, Davallada als inferns', en sa Pobla, en la que Antoni Ferragut fue el principal herido como público asistente, ayer empezó el juicio en Inca para determinar la responsabilidad de las administraciones y de los participantes del acto, que finalmente ha quedado visto para sentencia.
Durante la carrera, organizada por el Ajuntament de sa Pobla y por el Consell de Mallorca, Ferragut fue embestido por los vehículos y ha tenido que costear los gastos de una operación y estar diez meses de baja.
Indemnización
«En este tiempo no he recibido ninguna indemnización y parece que las administraciones se han ido pasando la culpa», indicó Ferragut. «Me encontraba viendo la carrera con mi hijo, que tenía siete años entonces, en el lugar indicado, cuando hubo el accidente», señaló el afectado.
Además, Ferragut precisó que hubo cerca de quince heridos más, aunque «yo fui el más grave de todos».
La vista de ayer en los juzgados de Inca sirvió para realizar las declaraciones del Ajuntament de sa Pobla, el Consell de Mallorca, los afectados y los mismos conductores implicados.
Cabe recordar que la vista judicial, prevista para el pasado mes de mayo, tuvo que aplazarse a causa que no compareció ningún representante del Consell de Mallorca. Aunque el Consistorio de sa Pobla si se personó ayer en el juicio, quien no se presentó fue el ex regidor de Fiestas, Arnau Rayó (Partido Popular), al frente del área en el Consistorio del municipio durante la competición.
La carrera de carretons tenía como objetivo fomentar la participación de los jóvenes con la competición de vehículos de construcción propia no motorizados y se llevó a cabo en una veintena de municipios.
Retirada
Sin embargo, la carrera se eliminó del programa insular de Joventut a causa del incidente en sa Pobla, que fue seguido sólo un día después por otro suceso en el municipio de Búger cuando una mujer perdió las dos piernas en un accidente de características similares en la carrera del pueblo vecino.