TW
0
GUILLEM MAS La Fira del Meló se consolidó en su edición de este año y se erige como la feria agrícola por excelencia de la comarca del Pla, y hace de Vilafranca un auténtico expositor de los productos agroalimentarios cultivados en la Vila. El acontecimiento consiguió vencer a la constante amenaza de lluvia que planeó durante toda la mañana de ayer.

El vilafranquer Tomeu Morlà ganó el tradicional Concurs del Meló Més Gros con un ejemplar que pesó 19'450 kilogramos, rozando el récord histórico de los 19'460, devolviendo de esta manera la hegemonía del concurso a Vilafranca. Y es que, tres de los cuatro melones con más peso de esta edición se han cultivado en tierras locales. En segunda posición quedó Pere Morlà con un melón de 17'290 kg, el tercer premio fue para Juanjo Mas-Déu de Palma con uno de 17'200 kg; mientras que el cuatro premio volvió a recaer en Tomeu Morlà con otro ejemplar de 17'070. Por lo que se refiere al Concurs del Meló de Qualitat, en la variedad calapoter, el primer premio recayó en Guillem Mascaró.

Así, la Fira del Meló fomentó su producto identificativo por excelencia con la degustación de helado y coca de melón. Como novedad, los jóvenes del pueblo disfrutaron de lo lindo con la celebración de la I Festa Bruta en la plaza de Sant Joan donde la sandía fue el plato fuerte.