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El Tribunal Supremo ha desestimado el recurso interpuesto por el ex arquitecto de Artà, Mateu Carrió, contra el regidor de EU-EV, Julen Adrián, y lo ha condenado a asumir las costas procesales. Carrió había denunciado, en diversas instancias, a Adrián y a otra integrante de EU-EV, María Ramírez, por presunto delito de calumnias e injurias por el cual solicitaba una indemnización de 450.000 euros.

EU-EV mostró ayer su satisfacción por esta resolución que «pone fin a todo un cúmulo de reclamaciones» a la vez que demuestra que «no había ninguna razón para habernos denunciado porque nosotros siempre hemos sido fieles a la realidad de los hechos».

La historia se remonta al 2003 cuando Carrió denunció a Adrián por una serie de declaraciones públicas que ponían en entredicho su actuación como profesional. «Carrió había hecho una serie de actuaciones que no considerábamos correctas y lo único que hicimos fue denunciarlo pero siempre documentados. Hoy podemos decir que todo ha terminado y que no ha sido una cuestión personal», expuso Adrián.