Un total de 350 personas visitaron ayer el parque natural de
s'Albufera con motivo de la celebración del Día Mundial de las
Aves. De estos visitantes, una veintena de personas se apuntaron a
las diferentes actividades que la dirección del parque organizó con
motivo de esta jornada a la que también se sumó el parque natural
de Mondragó.
El Día Mundial de las Aves se celebró ayer en un momento idóneo
porque en esta época llegan a s'Albufera aves de Europa y el
continente africano. La ubicación de este parque (entre los dos
continentes) lo convierte en un punto de referencia ornitológico a
nivel europeo, según explicó ayer el naturalista Pere Vicenç, que
guió a los visitantes en los diferentes itinerarios
ornitológicos.
«Estamos entre Europa y Àfrica y por aquí se paran aves de los
dos continentes, que van de un lugar a otro, y vienen aquí porque
necesitan un lugar tranquilo para descansar», explicó Vicenç.
Una buena muestra de ello es que en s'Albufera se han
contabilizado un total de 260 especies de aves, entre las
sedentarias y las que pasen sólo pasan una época del año en el
parque. Los visitantes pudieron disfrutar de los diferentes
itinerarios interpretativos y ornitológicos con los que
descubrieron las peculiaridades de s'Albufera. En Mondragó también
se organizaron diferentes actividades.
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