El Govern de les Illes está dispuesto a aparcar el proyecto de la
variante oeste de Algaida ante la oposición que ha suscitado esta
obra en el pueblo, pero no incluirá dentro del proyecto de
desdoblamiento de la carretera de Manacor la variante este. Es
decir, si el Ajuntament d'Algaida propone que se ejecute una ronda
más semiurbana, tal y como quieren las 900 firmas recogidas hasta
la fecha, deberá hacerse cargo de los gastos que supone está obra,
aunque contará con una subvención de la Conselleria d'Obres
Públiques.
Así se informó tras la reunión mantenida ayer por el presidente
del Govern, Francesc Antich, y el conseller d'Obres Públiques,
Josep Antoni Ferrer; el secretario general técnico, Joan Josep
Manila, con el alcalde de Algaida, Jaume Jaume, y varios
concejales. El batle de Algaida continuó sin pronunciarse sobre uno
u otro proyecto e indicó que será preciso analizar las
alternativas, ya que «si se ejecuta la variante oeste la financiará
el Govern y si se realiza la ronda semiurbana, el Ajuntament deberá
hacerse cargo de los gastos». «Afrontar esta obra supondrá un
esfuerzo para las arcas municipales. Es difícil optar por una
alternativa porque hay que analizar todos los factores»,
insistió.
El conseller de Obres Públiques, Josep Antoni Ferrer, aseguró
que su departamento está dispuesto a reestudiar el proyecto de la
variante oeste si se genera un conflicto en el municipio. En tal
caso, Ferrer recordó que recientemente se ha aprobado un decreto
por el que el Govern subvenciona proyectos de carreteras a los
ayuntamientos. «Otro expediente gestionaría la ronda urbana y
podría acogerse a este plan de ayudas». No obstante, Ferrer matizó
que en estos casos es preciso tener en cuenta el interés general,
«con todo el respeto hacia las plataformas».
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