Cierra Eléctrica Española: adiós a 76 años de iluminación en Palma

La histórica tienda, situada en el corazón de Avenidas y abierta en 1949, está en liquidación

TW
30

El cartel de 'Liquidación Total' cuelga de la fachada de la tienda Eléctrica Española, en el corazón de Avenidas. De esta manera se despiden así de 76 años de iluminación en Palma. El comercio original, abierto por Tolo y Matías Alberti, cierra después de luchar contra Internet y la caída del poder adquisitivo de los mallorquines. A mediados de marzo cerrará este local que incluso forma parte de la biografía de muchos palmesanos: era tradición que los recién casados pasaran por Eléctrica Española para decorar su hogar.

La última generación al frente de este negocio familiar, Fernando Alberti, reconoce «un sentimiento agridulce. Abrimos la primera tienda en la calle Costa i Llobera, done había material eléctrico y en la calle Tous i Maroto número 48. Luego, a principios de los años 70, nos fuimos a Avenidas. Creo que es el último de los grandes negocios familiares tradicionales que queda en Avenidas, si descontamos farmacias y estancos».

El nieto del fundador señala que «no quedaban más opciones, hemos intentado aguantar. En poco tiempo ha habido un gran cambio generacional. No había tantas ventas por Internet ni grandes superficies como ahora. Sumado a que se ha debilitado el poder adquisitivo de la clase media... La clase media y el tejido empresarial de las Islas ya casi no existe. Y además tenemos una gran carga fiscal». Alberti lamenta que «el grueso del beneficio que ganan las grandes superficies y las multinacionales se va de Mallorca».

La transformación del mercado se ha disparado en los últimos años y Fernando Alberti lamenta que «nos venían clientes con lámparas de grandes superficies o de Amazon con piezas rotas o que no sabían montar. Se pensaban que teníamos nosotros el recambio, se lo habían dicho en la misma gran superficie. Pero lo que era excepcional se ha convertido en la norma».

La historia de Eléctrica Española da para un libro y además, forma parte de la historia de Palma. La primera generación de los Alberti, Tolo y Matías, fueron los responsables de los primeros semáforos de Palma. «Vendíamos señales de tráfico, la iluminación pública que compraba el Ajuntament... Iluminamos las fuentes de la Plaza de las Tortugas y de la Reina». Se encargaron de vender las primeras centralitas telefónicas de los hoteles, los equipos de megafonía, los filtros y motores de piscina más innovadores de la época. «Mi abuelo se iba a Londres a comprar el material, iba acompañado de un traductor para hacerse entender. Vendíamos la última tecnología del momento», dice Fernando Alberti. Su padre, Francisco, también siguió la tradición familiar y aún sigue al pie del cañón.

Los tiempos han cambiado y el sucesor de la saga de comerciantes lamenta que «hace unos días nos pusieron una mala reseña en Google porque ya no colocamos un Papá Noel en la puerta de la tienda. Si no lo hacemos desde 1992...», dice con resignación.

Los propietarios de Eléctrica Española han vendido el local y estos días están en plena liquidación de existencias. Después se trasladarán a su tienda Trilamp que tienen en la carretera de Valldemossa número 68, que abrieron en 1989, dedicada igualmente y en exclusiva al mundo de la iluminación para particulares y empresas.