Palma, píxel a píxel

El Institut Municipal d’Innovació (IMI) está realizando un vuelo fotogramétrico que actualizará la cartografía de Ciutat. «Este vuelo se hace cada cuatro años desde 1981», señala Job Torres, gerente del IMI. El IMI ha contratado un avión (modelo CESSNA) dotado con una cámara aérea específica para fotografiar la superficie terrestre de la ciudad con sistemas de geoposicionamiento basados en el GPS.

El avión está peinando la ciudad, solo la zona urbana, y va dando pasadas mientras fotografía el tramo programado para esa jornada. Las ventajas sobre Google Maps son colosales: «Son imágenes de una calidad enorme y alta precisión. Casi se podrían ver las matrículas de los coches, e incluso las inscripciones del alcantarillado. Eso sí, no se verán las caras de las personas. Las imágenes de Google Maps son tomadas desde un satélite mientras que este avión vuelta a una altura muy baja y tiene un equipamiento con una capacidad fotográfica mejor que la de un satélite». Si antes las fotografías eran de carrete, ahora son digitales y con un peso de dos gigas cada una. Cada píxel equivale a 6 centímetros de la ciudad.

Torres revela que «las imágenes tomadas se irán superponiendo a medida que vuela el avión, que siempre lleva una coordenada geográfica». Así, se obtendrá una imagen estereostópica (tridimensional) que permitirá conocer la orografía, con un modelo digital de elevación que será capaz de medir la altura de edificios, puentes e incluso farolas. Y esta fotografía en alta resolución de la ciudad permite analizar su evolución. «En las imágenes más antiguas, s’Escorxador era todo campo mientras que se puede ver como el Portitxol estaba poco construido».

El objetivo es que una vez acabado el proceso, se cargue todo el material en un visor cartográfico. «Antes se utilizaba a nivel interno en Cort y si un ciudadano requería ciertos servicios, tenía que pagar unas tasas. Ahora queremos abrir el acceso de la información cartográfica tanto a nivel ciudadano como para la empresa privada», dice Torres.