Los arqueólogos se muestran sorprendidos por el hallazgo. Se cree que no se trata de oficiales franceses porque todos fueron amnistiados. | Redacción Digital

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Hallazgo inesperado en el castillo de Bellver, en Palma. Los trabajos han rescatado del olvido dos esqueletos completos. Se trata de los restos óseos de dos adultos. Según ha informado este martes el Ajuntament de Palma, se encontraban a unos 50 cm. de profundidad bajo el pavimento actual del Bastió de Ponent, en la parte opuesta al mar, la que mira de frente al coll de sa Creu. Los huesos han sido hallados por casualidad durante la excavación arqueológica subsidiaria en la obra iniciada el pasado mes de agosto, trabajos para consolidar la estructura del segundo recinto defensivo, reponer los lienzos ruinosos y estudiar la pavimentación del foso interior de la emblemática fortaleza.

Según han informado fuentes consistoriales se trata de deposiciones primarias y la postura es de decúbito supino, con las piernas estiradas y los brazos cruzados sobre la cintura. Desde el ayuntamiento han manifestado que dicho hallazgo no supone la paralización de los trabajos que se están llevando a cabo en el castillo de Bellver. ¿De qué época podrían datarse los cuerpos desenterrados? Aparentemente, los investigadores han coincidido en señalar que ambos habrían sido sepultados a finales del siglo XVIII o principios del siglo XIX, algo que ha corroborado la aparición de un mechero de bronce. Esta cronología abre las puertas a la hipótesis de que sean personas relacionadas con la guerra del Francés.

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En aquel conflicto bélico (1808-1814) España sufrió la invasión de las tropas napoleónicas, que establecieron el reinado temporal de José I, de malnom Pepe Botella, hermano de Napoleón Bonaparte. En el marco de la contienda el castillo de Bellver fue utilizado como prisión para los soldados y oficiales franceses vencidos en la batalla de Bailén en 1808; otros tantos fueron llevados a Cabrera, donde permanecieron largo tiempo en condiciones deplorables tal y como ha acreditado el trabajo de los historiadores. Sin embargo se cree que las personas que hallaron reposo eterno en el castillo no eran oficiales militares, porque todos los combatientes de cierto rango lo abandonaron para regresar a su país. Por otra parte, el hallazgo de restos humanos dentro del recinto defensivo de la capital balear no deja de ser un hecho insólito, y permite plantear nuevas hipótesis y estudios, anticipan los expertos.

Se trata de la segunda joya del pasado que emerge ante nuestros ojos en las últimas semanas en el castillo que 'vigila' la bahía de Palma desde lo alto de esa colina, que ejerce las funciones también de pulmón verde de la capital mallorquina. No en vano a finales del pasado mes de septiembre apareció ante los arqueólogos «una estructura de cierre del paseo de ronda, en forma semicircular», datada de la época medieval. Los trabajos de conservación no impiden que los visitantes puedan disfrutar del castillo de Bellver, una parte eminente de la historia de Palma, Mallorca y Baleares en su conjunto.