TW
1

Como ya ocurriera con Sant Antoni, que en muchos pueblos de Mallorca es festa grossa, Sant Sebastià se vivirá este año en Palma de una forma única y algo descafeinada, sin las aglomeraciones que se acostumbran a dar alrededor de las torradores y en los conciertos que salpican la ciudad debido a las restricciones derivadas de la pandemia de coronavirus.

Orgull Llonguet, la organización que desde hace años dinamiza desde un punto de vista popular las fiestas patronales de Palma, animó a los ciudadanos a vivir su Revolta Llongueta recogidos desde casa, y a compartirlo a través de las redes sociales.

Muchos han respondido al reclamo. A través de la etiqueta '#novallonguelitat', una adaptación llongueta de la nueva normalidad con la que nos obliga a lidiar el coronavirus, son numerosas las personas que han compartido su experiencia. Si hay que reivindicar a distancia una celebración con apego y un producto típico para la capital balear, se reivindica.

Noticias relacionadas

Este martes, con un soleado día de trasfondo, Orgull Llonguet se ha preguntado por qué no llueve este año, atendiendo al hecho de que, en muchas ocasiones, la revetlla de Sant Sebastià viene pasada por agua. No han sido los únicos en hacer mención al típico mal tiempo que suele coincidir con las fiestas patronales de Palma.