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La línea de autobús 31 de Palma, en los tramos desde es Pil·larí y s'Aranjassa hasta el acuario; y la línea 23 en los fines de semana y festivos, funcionarán a demanda de los usuarios que deberán solicitar el transporte por medio de una aplicación de móvil o bien llamando a un teléfono habilitado.

Desde el pasado 4 de abril, este servicio ya ha funcionado en periodo de pruebas para la L31 (Sant Jordi-Sindicat) y para la L23 (Arenal-Plaza de España) para cubrir determinados tramos y días de fin de semana y festivos con poca afluencia de pasajeros, ante el descenso del uso por la crisis sanitaria de la COVID-19, ha detallado el Ayuntamiento de Palma en un comunicado.

Para los usuarios de la L31, este servicio a demanda funciona desde las zonas de s'Aranjassa y es Pil·larí hasta el área de intercambio situada frente a Palma Aquarium, donde se puede transbordar con otras líneas como las 25, 35 y 23 durante los días laborables.

Quienes quieran utilizar el 31 en esos tramos hasta el acuario, deben hacerlo por medio de la aplicación Spare o llamar por teléfono al 608790929 y estar en la parada cinco minutos antes de la hora de recogida, que realizará un taxi o un vehículo propio de la EMT.

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La puesta en marcha de este servicio, es posible gracias a la colaboración entre la EMT, la plataforma tecnológica Spare y el sector del taxi.

El servicio se presta en las paradas del 31 en sentido Palma Aquarium números 283 (S'Aranjassa); 952 (es Pil·larí) y 366 (Aquarium); y en sentido es Píl·larí-s'Aranjassa en las paradas 384 (Aquarium), 947 (es Pil·larí) y 283 (S'Aranjassa); así como durante los fines de semana y festivos en la L23 (Arenal-parque acuático-plaza de España).
Este servicio evita esperas a los usuarios.

El teniente de alcalde de Movilidad Sostenible, Francesc Dalmau, ha comunicado este lunes al sector del taxi la posibilidad de prestar este nuevo servicio, con la filosofía de «compartir sinergias y crear una oportunidad frente a esta situación de crisis».

Esta formula permite adaptar de forma rápida y eficiente la demanda de la movilidad actual a los cambios ocasionados por la crisis sanitaria. «Y contribuimos a paliar los efectos que la crisis de la COVID-19 provoca al sector del taxi», ha añadido Dalmau.