Imagen de archivo de un operario de Emaya limpiando un imbornal ante la posibilidad de tormenta en Palma. | J. PEREZ

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Hasta un 60 % de las canalizaciones de aguas pluviales y fecales en inmuebles de más de 50 años de Palma son unitarias, lo cual es un problema a la hora de evitar la saturación de las depuradoras y reducir los vertidos de aguas mixtas al mar o torrentes. Por ello actualmente Emaya promueve la separación en origen de estas dos redes informando a vecinos, comunidades y administradores de finca y recordándoles la obligación de hacer la separación. Y es que la responsabilidad de separar estas dos redes en las bajantes de los edificios es de los propietarios.

La separación en origen es obligatoria por ordenanza municipal desde 1998 pero Palma tiene aún en el centro y en el ensanche muchos edificios anteriores.

Emaya tiene inventariados 748 kilómetros de red separativa de aguas residuales y 617 kilómetros de aguas pluviales, además hay 40 kilómetros de red mixta. Por tanto, es cierto que hay mucha red separativa, pero desde la empresa se destaca que la experiencia de la separación de pluviales en la zona de es Born, realizada entre los años 2000-2010, aconseja que no es suficiente limitarse a desdoblar las redes unitarias. «Allí se hizo la separación de la red pero si no existe una división en origen en los edificios la actuación resulta poco efectiva, no sirve de nada la red separada porque cuando llueve el agua que cae sobre las terrazas y tejados se mezcla con las residuales», se explica desde la empresa municipal.

Actualmente, Emaya promueve la separación en origen en los edificios aprovechando los lugares en los que la empresa esta realizando obras de renovación de la red de alcantarillado. Es el caso del trabajo que se hace en la zona de la Plaza de Toros o s’Arenal-Ses Cadenes. Cuando se va a hacer la obra de la red de alcantarillado se informa a los vecinos, comunidades y administradores de fincas.

Otra línea de actuación es la solicitud al Ajuntament para que la separación de pluviales se tenga en cuenta en los Informes de Evaluación de Edificios (IEE) y se obligue a los edificios a realizar esta separación. Urbanisme ya ha trasladado la petición al Ministerio de Fomento para que la contemple cuando revise el modelo de ficha de la IEE.

La evolución desde un sistema unitario de alcantarillado hacia una red separativa para pluviales no se inició en Palma hasta los años 70 del siglo pasado y a día de hoy sigue incompleto.