Todas las barcas han sido retiradas en los últimos días por sus propietarios para evitar problemas con la APB. | M. À. Cañellas

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La Autoritat Portuària de Balears (APB) ha autorizado al Club Marítimo Molinar Levante seguir gestionando el edificio que alberga el restaurante y sus oficinas, siempre cuando sea compatible su utilización con el desarrollo de las obras que se iniciaron el pasado 18 de marzo.

El presidente del Club Marítimo Molinar, Rafael Crespí, señaló este jueves que, tras el requerimiento de la APB, «hemos obtenido la ocupación temporal del restaurante y la oficina social hasta el último momento. No hay fecha prevista de desalojo, pero estaremos hasta que nos dejen».

La APB indica que el edificio no será derribado «sino que se procederá a su remodelación y restauración integral para que esté en perfectas condiciones para el futuro concesionario que lo gestione».

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La constructora ACSA, Obras e Infraestructuras, S.A., adjudicataria de las obras durante los próximos diez meses por un montante económico de más de tres millones de euros, lleva una semana realizando labores de desescombro y desmonte manual de tuberías y material de desecho, con el fin de que las máquinas puedan entrar a mediados de la próxima semana y procedan al derribo de todas las instalaciones.

La notificación de la APB para que los propietarios de las embarcaciones las sacaran del recinto del club «se ha cumplido a rajatabla y en estos momentos está libre la dársena».

El presidente del club marítimo añadió que «marineros y voluntarios están colaborando en este proceso, con el fin de trasladar los barcos a la zona que nos ha asignado la Autoritat Portuària, pero las premuras que nos han metido han desmontado toda la planificación prevista para trasladar los barcos fuera de la dársena».

Crespí resalta que «hemos cumplimentado las notificaciones de la APB, pese a las diferencias que mantenemos con el ente público por el desarrollo de este proyecto».