Llegada del líder de Junts Carles Puigdemont a las inmediaciones del Palau de la Generalitat de Catalunya. | Alberto Estevez

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Los Mossos d'Esquadra habrían detenido a dos agente del propio cuerpo policial por supuestamente facilitar la huida de Carles Puigdemont, después de que este finalizara su discurso en el Arc de Triomf y haya desaparecido. Según han informado a EFE fuentes cercanas a la investigación, la policía catalana ha abierto una investigación para averiguar si agentes del cuerpo han ayudado a Puigdemont a llegar hasta el acto de 'bienvenida' que le ha organizado su partido y las entidades independentistas en Barcelona, sin haber sido interceptado por ningún cuerpo de seguridad, y a huir posteriormente.

Uno de los arrestados, además de haber ayudado al expresident del Parlament, también sería el titular del coche en el que habría huido Puigdemont, un Honda de color blanco, tal y como han informado varios medios de comunicación. Este mismo agente ha presentado un habeas corpus ante un juzgado de Barcelona, al que ha pedido anular su arresto y decretar su libertad al considerar que es ilegal y arbitrario.

Según ha señalado la Cadena Ser, detrás del escenario había dos vehículos, este blanco, en el que supuestamente ha logrado salir, y otro de color negro, con matrícula holandesa. Los Mossos sospechan que ha utilizado estos dos coches en su huida.

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También se investiga si las personas que acompañaban a Puigdemont a su llegada al acto en Arc de Triomf, lo que ha hecho cruzando las calles de Ciutat Vella -sin apenas transeúntes, lo que habría permitido una detención en condiciones seguras-, eran mossos d'esquadra de permiso. Si agentes de la policía catalana, incluso fuera de servicio, hubieran colaborado en la huida de Puigdemont una vez en España, podrían haber incurrido en un delito, ya que el expresidente catalán tiene una orden de detención nacional vigente que vincula a todos los efectivos de las fuerzas de seguridad del Estado. De hecho, tras la huida de Puigdemont, fuentes del Tribunal Supremo han subrayado a EFE que el juez Pablo Llarena dejó claro en el auto en el que descartó amnistiarlo que la orden de detención sigue vigente y, por lo tanto, las fuerzas de seguridad tienen la obligación de arrestarlo y ponerlo a disposición judicial.

Los Mossos habían activado una ‘operación jaula' con el objetivo de dar con el paradero del expresident y detenerlo. Esta alerta se había extendido por toda Cataluña con controles para localizar y detener al expresident, a quien se le ha perdido el rastro tras intervenir en un acto multitudinario en Barcelona, tras siete años huido de España, pese a tener una orden de arresto. Incluso se habría dado una persecución policial en coche para detenerlo, sin embargo se le ha perdido la pista al poco tiempo.

Pese a que tanto los Mossos como la consellería de Interior niegan cualquier acuerdo previo con Puigdemont para una detención discreta, fuentes conocedoras del operativo policial han indicado a EFE que trabajaban con la idea arrestarle tras el acto en el Arco del Triunfo una vez dentro del parque de la Ciutadella, alejados ya de la multitud y, por lo tanto, sin riesgos para la seguridad.