En una anterior campaña la portavoz de Arran ya apostaba por la desobediencia ante «leyes injustas». | Efe

TW
6

La última polémica que remueve la relación entre Cataluña y el resto del Estado no es nueva, ni mucho menos. La decisión del TSJC de fijar la obligatoriedad de un mínimo de horas lectivas en todos los centros públicos del Principado tiene consecuencias inmediatas, y poco después de conocer la decisión de los jueces ya resuenan los primeros ecos de respuesta en clave de «desobediencia».

Noticias relacionadas

De este modo, los jóvenes independentistas de Arran, en el sector ideológico más emparentado con la CUP, han publicado un escueto tuit de reacción a la información de tribunales, que expresaban un claro y rotundo «Defensem la llengua, desobeïm l'Estat!». Por el momento ni Òmnium ni la ANC, organizaciones mayoritarias en el seno de la sociedad civil soberanista, han expresado su sentir ante el anuncio del alto tribunal catalán, algo que se espera que suceda en las próximas horas. Tampoco han reaccionado a la noticia ni Esquerra ni tampoco el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès.

A su vez, voces de Junts se han expresado con contundencia. Así Aleix Sarri, director de la Oficina Europarlamentaria del partido que creó Carles Puigdemont, ha considerado en Twitter que «los jueces españoles siguen implacables en su voluntad de aniquilar la lengua catalana de la escuela. A ver si aprendemos por fin que no hay atajos ni subterfugios legales ante una concepción anticatalana de la ley. Para proteger la escuela en catalán, es necesario un estado catalán».