Representantes de agencias de turismo protestan en Valencia. | Efe

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Las agencias de viajes encaran el próximo verano «con incertidumbre y mucha cautela», ha señalado a Efe la presidenta en Navarra de la Federación Empresarial de Asociaciones Territoriales de Agencias de Viajes Españolas (FETAVE), Amaya Irigoyen, quien ha afirmado que «no nos vamos a lanzar a lo loco a vender como si no hubiese un mañana».

Irigoyen ha asegurado que, por un lado, en las agencias de viajes «estamos contentos, porque por fin podemos empezar a pensar que tenemos producto para vender, no todo el producto, porque cada país tiene sus restricciones».

Por otro lado, ha dicho, hay «mucha cautela y mucho miedo», porque «ahora hay una apertura», pero no se sabe cuánto va a durar y puede que «nos encontremos que de repente haya aperturas y cierres con muy poquito tiempo para poder tomar decisiones de ayuda al cliente».

«Va a ser un verano muy complicado», ha declarado Irigoyen, quien ha señalado que «la gente tiene muchas ganas» de viajar, pero «llevo meses diciendo que trabajamos mucho pero producimos muy poco», ya que fundamentalmente se están dedicando a ser «centros de información covid, sobre qué se puede hacer en cada momento».

Irigoyen ha destacado que es «imposible» que la temporada turística estival sea como la de 2019, aunque «andaremos similares a lo que hubo en el 2020, incluso un poquito más si las vacunaciones van a un nivel rápido, podemos viajar a una zona segura y no hay cierres perimetrales».

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Ha matizado que, en todo caso, solo con el turismo interior no salvarían la temporada, porque «la mayoría de las agencias vendemos nacional, pero nuestro gran fuerte es Europa y sobre todo largas distancias».

«El turismo nacional es muy curioso, la gente confía en nosotros plenamente para irse a Vietnam, pero hay un concepto de que Cádiz o Canarias me lo hago en Booking o en cualquier otra plataforma», ha apuntado.

En ese sentido, ha considerado que las agencias van a recuperar algo de producto nacional «porque esas grandes plataformas no se han portado bien, la gente ha tenido que estar llamando a teléfonos de pago, no ha recibido reembolsos y les han dado bonos, mientras que nosotros hemos reembolsado casi el 100 % de lo que vendimos».

Irigoyen ha declarado que la gran reivindicación del sector es «que nos clarifiquen si se va a poder viajar o no» y que esa información llegue cuanto antes, porque, «si la clarificación nos la hacen el 1 de julio», ese mes «lo hemos perdido».

Ha aludido al respecto a un cliente que preguntó qué ocurre si le llaman para vacunarse estando de vacaciones y desde las autoridades sanitarias «nos han dicho que la agenda de vacunación hay que cumplirla, pero que se podría intentar cuadrar agendas en caso de necesidad». Esa respuesta, ha afirmado, «es un que sí pero que no».

Por ello, ha insistido en pedir «claridad en la información y que no sea todo tan abierto a la interpretación», porque ahora «no podemos poner la mano en el fuego por absolutamente nada».