Caras largas y gestos de gravedad en la comparecencia de Albiol para dar un primer análisis de los resultados cosechados por el PP catalán el 21-D. | Efe

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El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha convocado este viernes una reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PP para analizar los resultados en las elecciones del 21 de junio, en las que la candidatura encabezada por Xavier García Albiol ha sufrido un batacazo electoral logrando solo tres diputados, quedando relegada a última fuerza política en el Parlamento catalán.

Con sus 184.041 votos y tres diputados, siete menos que en las autonómicas del 27 de septiembre de 2015, el PP se deja en el camino más de 165.000 votos, muchos de los cuáles han ido a parar a Ciudadanos (Cs), aglutinando más de un millón de votos y 37 escaños.

Si en 2015 logró ocho escaños en Barcelona y uno en cada una de las demás provincias, en estos comicios el PPC se ha quedado solo con tres escaños en Barcelona. En el último momento de la noche perdió el diputado que tenía en Tarragona, que se lo quedó Ciudadanos.

La victoria del partido de Albert Rivera evidencia que es el partido naranja el que ha conseguido «capitalizar» el artículo 155, a pesar de que Mariano Rajoy se ha volcado en la campaña haciendo bandera de que ha sido su Gobierno el que aprobó este precepto constitucional para recuperar la legalidad y la convivencia en Cataluña.

Aunque todas las encuestas pronosticaban un revés electoral del PP, la realidad ha superado a los sondeos, ya que el PP ha logrado su mínimo histórico en Cataluña. Ni en los tiempos de Alianza Popular obtuvo tan baja representación, ya que en 1988 la formación que lideraba Manuel Fraga cosechó 143.241 sufragios y seis escaños.

«Hoy es un día malo para el PP», ha resumido Albiol en su comparecencia pública en Barcelona, en la que ha mostrado su «preocupación» por el futuro de Cataluña con una mayoría independentista en el Parlamento. Eso sí, ha advertido de que el Gobierno de Rajoy velará porque se respete la libertad y la democracia.

Albiol ha lanzado duras críticas a Ciudadanos, al que ha culpado de «fracasar» con su apelación al voto útil al no lograr una mayoría constitucionalista en el Parlamento catalán. «Algunos seguramente estarán muy satisfechos porque han ganado las elecciones y tendrán alegría durante cinco minutos. Pero ellos igual que nosotros, probablemente estaremos en la oposición durante algunos meses», ha exclamado.

Desde Génova no han sido tan críticos contra Ciudadanos. El portavoz del PP, Pablo Casado, ha centrado su comparecencia en salir en defensa de Rajoy, que, según ha dicho, ha actuado guiado por el interés de España, no el partidista. «El PP es un partido de Estado», ha apostillado.

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Casado ha dicho que «evidentemente el partido ha tenido un mal resultado» que ni deseaban ni esperaban. «Pero estamos a las duras y a las maduras», ha manifestado, para avisar después que si el nuevo Gobierno sigue por la vía unilateral habrá «consecuencias» penales y políticas.

Aunque Mariano Rajoy y la cúpula del PP nacional han seguido en 'Génova' el recuento electoral de las catalanas, será este viernes cuando harán un análisis en profundidad de los resultados.

A esta cita acudirán los barones del PP, en los que ha empezado a extenderse la preocupación por los resultados de Ciudadanos y la posibilidad de que haya un efecto contagio en otras comunidades autónomas. Eso sí, en la dirección del partido recalcan que aún falta mucho para las autonómicas, que tendrán lugar en junio de 2019.

Los tres escaños actuales distan de los 19 que logró Alicia Sánchez-Camacho en 2012, el mejor resultado del partido en esta comunidad si bien el PSC (20) y ERC (21) le superaron en escaños y lo relegaron a quinta fuerza. En esos comicios, los populares obtuvieron 471.681 votos, un 12,98%.

Dos años antes, en las elecciones de 2010, Sánchez-Camacho había logrado 18 diputados (387.066 votos y un 12,37%) pero se convirtió en tercera fuerza (CiU, 62 escaños y PSC, 28 escaños), superando a los republicanos, que solo lograron 10 escaños en el Parlamento catalán.

Los resultados cosechados el 21-D por el PPC también se quedan por debajo de los apoyos que consiguió en 2003 y 2006 el exminitro de Asuntos Exteriores Josep Piqué, quien logró 15 actas la primera vez que encabezó la candidatura del partido y tres años después se quedó en 14 diputados. En 2007, Piqué presentó su dimisión tras imponer 'Génova' directamente el equipo de campaña del partido en Cataluña.

Antes que Piqué había sido Alberto Fernández Díaz el cabeza de lista del PP, que se quedó en 12 diputados en los comicios de 1999. Cuatro años antes, en 1995, Alejo Vidal-Quadras alcanzó los 17 diputados en el Parlamento catalán, pero su relevo fue uno de los acuerdos de los llamados 'Pactos de Majestic' entre CiU y PP que permitieron la investidura de José María Aznar al frente del Gobierno de España.

Incluso en 1992 y 1988 los populares tuvieron más escaños que ahora, con 7 y 6 escaños respectivamente. En 1984, Alianza Popular se presentó en coalición con Partido Demócrata Popular y Unión Liberal, logrando 221.601 votos y 11 escaños en el Parlamento catalán.