El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera (i), junto al portavoz en el Congreso, Juan Carlos Girauta (d), mientras se dirigían a la reunión de su grupo parlamentario este martes en la Cámara. | Efe

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El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha hablado este martes con el presidente de la gestora del PSOE, Javier Fernández, a quien ha deseado que los socialistas «acierten» con sus decisiones y que no pongan por delante de los españoles su debate interno.

Rivera, en su intervención en abierto ante el grupo parlamentario de Ciudadanos, cree que, tras la crisis abierta en el PSOE, está más cerca la posibilidad de evitar unas terceras elecciones y por eso ha pedido al PP y a Mariano Rajoy que «no ponga condiciones» a los socialistas para que se abstengan.

«A los que no han movido ficha hasta ahora les toca moverla, y a los que quieren ser presidentes les toca ir a por la investidura», ha subrayado Rivera.

Como al PP le faltan once abstenciones para que Rajoy pueda gobernar -da por hecho el apoyo de C's si el PP cumple con las reformas contempladas en el pacto firmado en agosto-, Rivera ha defendido que los socialistas puedan poner requisitos «lógicos» para facilitarle la investidura.

Rivera, que ha manifestado «respeto» al proceso interno del PSOE porque lo que decidan afectará a todos los españoles, se ha puesto a disposición de los socialistas por si «son necesarios» para cualquier negociación y desbloquear la legislatura.

Ha recalcado que es «mucho mejor» un Ejecutivo controlado por la oposición, sin mayoría absoluta que uno «descontrolado» con una mayoría más amplia, asegurando que desde el Parlamento «se puede marcar» la línea de actuación.

En este «interín» que se ha abierto con la crisis del PSOE, el líder de Ciudadanos ha animado a los partidos mayoritarios a hacer un «último esfuerzo» y a que «asuman la realidad».

Quien no sepa dialogar y no quiera cambios «no está preparado para la etapa política que viene», ha advertido el presidente de C's.

Albert Rivera ha aprovechado para criticar al PP y al PSOE por no ponerse de acuerdo para «desbloquear» el país y si lo hagan, en cambio, para reformar la ley electoral con el fin de que no haya elecciones en Navidad si llega el caso, un acuerdo que ha calificado de «sintomático».