El lehendakari, Iñigo Urkullu, durante su intervención en la inauguración este jueves en Vitoria del XI Congreso Nacional de la Abogacía, que reúne a 1.200 profesionales en esta cita cuatrienal que se centrará en el análisis de los avances tecnológicos y científicos aplicados al mundo del Derecho. | Efe

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La organización terrorista ETA ha mostrado este jueves su disposición a compartir con el Gobierno Vasco y con el resto de «agentes políticos y sociales» vascos el diseño de un proceso de desarme.

En un comunicado remitido a los diarios Berria y Gara y al portal Naiz, pocas horas antes del inicio de la campaña para las elecciones municipales y forales en el País Vasco, ETA invita a todos los organismos que están «a favor de una solución» a entablar un diálogo dirigido a acordar «vías razonables» para «superar las consecuencias del conflicto».

Ambos diarios publicarán este veirnes íntegramente el documento remitido por la organización terrorista, pero los dos avanzan este jueves en sus respectivos portales digitales algunos de los principales contenidos de este comunicado.

ETA confirma que continuará con el proceso de «sellado» de su armamento que asegura estar llevando a cabo desde principios de 2014, a pesar de las dificultades que, según denuncia, están poniendo los Estados español y francés.

Aunque incluye al Gobierno Vasco en el posible «diseño compartido» del proceso de desarme, ETA critica duramente la propuesta que a este respecto hizo pública el ejecutivo autonómico el pasado 21 de diciembre.

El Gobierno Vasco propuso a ETA la creación de un Comité para el Desarme, formado por miembros del llamado Foro Social, personalidades internacionales y representantes del ejecutivo autonómico.

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Este Comité recibiría de ETA la localización del depósito de todas sus armas y explosivos, y posteriormente esta información se remitiría al Gobierno Vasco para que «actuara como legalmente proceda».

En el comunicado, la organización terrorista desecha este modelo porque no busca el acuerdo y porque, a su juicio, pretendía perjudicar el proceso de sellado de su armamento, así como la posición de la izquierda abertzale.

Igualmente, la banda armada opina que la propuesta del Gobierno Vasco no era viable y se basaba en un «esquema de vencedores y vencidos».

Pese a criticar esta iniciativa, ETA admite que el ejecutivo autonómico tiene un papel que jugar en el proceso de «resolución de las consecuencias del conflicto», por lo que le invita a participar, junto con el resto de «agentes políticos y sociales» dispuestos a ello, en el diseño de una hoja de ruta global para abordar dichas «consecuencias», término con el que ETA se refiere habitualmente a asuntos como víctimas, presos, desarme y «desmilitarización».

La organización terrorista entiende que en los últimos tiempos se han sentado algunas bases para avanzar en esta materia, entre las que cita hechos y documentos como las recomendaciones del Foro Social, la Declaración de Baiona, la denominada «Vía vasca para la Paz» presentada recientemente por EH Bildu, los pasos dados por los reclusos de ETA e, incluso, la propuesta «Zuzen Bidean» del propio Gobierno Vasco.

Esta iniciativa del ejecutivo vasco, presentada el pasado 29 de noviembre, recogía 20 medidas dirigidas a abordar la cuestión de los presos de ETA, entre ellas el acercamiento a prisiones próximas al País Vasco.