Fotografía facilitada por el PSOE del secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba durante su intervención ante el Comité Federal del PSOE. | Efe

TW
14

El PSOE tendrá candidato para la presidencia del Gobierno a finales del mes de noviembre y para los comicios autonómicos y municipales en septiembre, según el calendario y el reglamento de primarias que ha aprobado este sábado el Comité Federal del partido tras más de siete horas de debate.

La idea del PSOE es que el proceso de primarias para las elecciones autonómicas y locales se inicie en junio y culmine en septiembre, mientras que el proceso para las generales comenzaría en octubre y acabaría con la votación a finales de noviembre.

Algún miembro de la dirección ha aventurado que las primarias podrían celebrarse el 30 de noviembre después de que un Comité Federal abriera oficialmente el proceso el 4 de octubre.

No obstante, el Comité Federal ha delegado en la Ejecutiva la posibilidad de alterar el calendario de las primarias autonómicas si así lo solicitan las direcciones regionales y en función de sus circunstancias particulares.

De hecho, el comité -en el que sólo ha habido dos abstenciones- ha dado el visto a las primarias abiertas en el PSPV, a la que están llamados los socialistas y simpatizantes valencianos el próximo 9 de marzo, en lo que serán las primera experiencia del partido con este modelo de elección de candidatos.

Participar en las primarias abiertas en las que se elegirá al candidato del PSOE a la Moncloa costará 2 euros a los ciudadanos que no sean militantes y los interesados deberán inscribirse en un censo previo que estará abierto al menos un mes, y se cerrará seis días antes de la votación.

La elaboración de este censo previo ha sido una de las principales críticas que ha esgrimido una de las posibles candidatas que estaría mejor posicionada según las encuestas, Carme Chacón, que considera que entorpece una participación masiva de los ciudadanos.

Le ha contestado a puerta cerrada el propio secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, que ha dicho que él es el primer interesado en que las primarias «salgan bien» y en que la participación sea la mayor posible.

En esta misma línea, el secretario de Organización, Óscar López, ha justificado ese censo previo en la necesidad de evitar fraudes, «aluviones de última hora» o «acarreo de votos» y ha defendido que es un reglamento «muy consensuado», «trabajado», «garantista» y «transparente».

Tal y como ya se había adelantado, los precandidatos deberán recoger un mínimo de un 5 y un máximo de un 10 por ciento de avales de los militantes del partido, apoyos que incluso podrían recogerse de forma telemática.

Noticias relacionadas

Una vez que haya al menos dos candidatos, se abrirá el registro para que los ciudadanos puedan apuntarse para votar en las primarias, previo pago de esa cuota simbólica de 2 euros, en el caso de las primarias abiertas.

Durante la campaña, la «junta electoral» del PSOE, formada por once militantes independientes y un representante de cada candidatura, garantizará que se desarrolle en condiciones de igualdad, que puedan celebrarse debates entre los candidatos, y evitará irregularidades en la financiación de las campañas.

Una vez que el Comité Federal ha puesto fecha a las primarias, los dirigentes del PSOE han coincidido en que es el momento de plantear una alternativa seria al PP y de ganar las próximas elecciones europeas de mayo.

Se trata, en palabras del presidente asturiano, Javier Fernández, de evitar antes de tiempo un «desfile de modelos» o un «casting» de posibles candidatos.

También la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha emplazado a sus compañeros a centrarse en las europeas para que sean el comienzo de una «ola de cambio».

El propio Rubalcaba ha sostenido que España «se juega» en buena medida su recuperación económica en los comicios europeos y ha hecho hincapié en que será la primera vez que los ciudadanos podrán decir «no a Rajoy» y «pararle los pies».

Buena prueba del ambiente de unidad que ha presidido la reunión es que sólo ha habido dos abstenciones, la del expresidente castellano-manchego José María Barreda y la del dirigente de Izquierda Socialista Juan Antonio Barrio de Penagos.

Tampoco, una vez más, ninguno de los posibles candidatos ha deshojado la margarita y ha avanzado si concurrirá a las primarias.

Chacón, por ejemplo, se ha limitado a decir que espera una participación masiva para encontrar a la persona «más competente», mientras que Eduardo Madina o Patxi López, han respondido con evasivas y han insistido en que ahora no toca.

Javier Fernández, que también había sonado en los últimos días, ha bromeado diciendo que eso es consecuencia de que tiene «muchos amigos».