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La presidenta del PPC, Alícia Sánchez-Camacho, anunció ayer que pedirá personarse como acusación particular por la grabación que hizo la agencia de detectives Método 3 de una comida privada que mantuvo en 2010 con la exnovia de Jordi Pujol Ferrusola.

La líder del PPC pedirá asimismo en los próximos días que la demanda civil que presentó contra Método 3 se incorpore a la demanda penal, con la intención de «llegar hasta el final y descubrir quiénes han sido los responsables de la grabación».

«Pediré la acumulación de delito, de la grabación y la posible comercialización de la conversación. (...) Y ya no haré más declaraciones al respecto, me defenderé en el proceso judicial. Son otros los que pueden estar muy nerviosos, yo estoy preparada para aguantar este procedimiento», dijo.

Sánchez-Camacho también anunció que se querellará contra todos los medios de comunicación que publiquen la transcripción de la conversación que registró Método 3, una grabación que, dijo, «seguro que no se ha dado a conocer ahora por casualidad».

Asimismo, Sánchez-Camacho volvió a pedir la dimisión del director general de Servicios Penitenciarios, Xavier Martorell, por su presunta relación con los casos de espionaje, y que el conseller de Justicia, Germà Gordó, comparezca ante la Cámara legislativa catalana.