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El colectivo de presos de ETA (EPPK), que agrupa a los presos que siguen la línea oficial de la dirección de la banda terrorista, ve aspectos «significativos» en el plan del Gobierno para la reinserción social de los condenados por terrorismo pero en un comunicado publicado ayer por el diario Gara señala que cualquier programa que «tenga como base» el binomio «arrepentimiento-delación, nace muerto y estéril».

El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, afirmó ayer que el Gobierno no reconoce «ninguna legitimidad» a la denominada comisión internacional de verificación del alto el fuego, que el viernes dijo que la banda terrorista ETA le ha transmitido que está «preparada para dialogar».

Beneficios penitenciarios

«Han intentado contactar con nosotros, pero el Gobierno no reconoce ninguna legitimidad a estas personas porque con la Guardia Civil y la Policía hay suficientes verificadores para comprobar si ETA se disuelve o no», subrayó Fernández Díaz a su llegada al XIII congreso del PP catalán en Barcelona.

«ETA tiene que dejar de engañar a sus presos, debe decirles la verdad, que es lo que yo acabo de decir», añadió Fernández Díaz, añadiendo que la política del Gobierno en este asunto es la del cumplimiento del Código Penal, del reglamento penitenciario y la de la reinserción individual en el marco de la ley. «Si los presos se desvinculan de ETA y en el marco de la ley, y sólo en este marco, podrán acceder a los beneficios penitenciarios que la ley otorga a los presos»,pormenorizó.