Imagen pool de televisión, de María José Campanario (c), esposa del torero Jesulín de Ubrique, y su madre, Remedios Torres (d), imputadas en la Operación Karlos, durante la primera jornada del juicio.

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Insultos y gritos de «ladrones» a la entrada de los procesados y la petición de anulación del juicio por los abogados de los acusados protagonizaron ayer la primera jornada del juicio de la 'Operación Karlos' celebrado en la audiencia Provincial de Cádiz.

La Audiencia enjuicia a una treintena de acusados de estafar a la Seguridad Social para obtener fraudulentamente una incapacidad laboral, entre ellos la esposa del torero Jesulín de Ubrique, María José Campanario, que se sentará en el banquillo bajo una petición del fiscal de cuatro años y medio de cárcel.

Desde las tres de la tarde, medio centenar de personas se han concentrado ante las puertas de la Audiencia a la espera de ver a los imputados, en especial, a María José Campanario, foco de atención para la prensa del corazón.

A la llegada de los acusados se han proferido gritos e insultos a los acusados de la 'Operación Karlos' a los que han llamado «chorizos» y «ladrones».

La expectación que ha generado la celebración del juicio no se ha visto tanto en el público congregado como en los medios de comunicación, ya que hasta 40 medios se han acreditado para cubrir las sesiones.

El primer letrado en solicitar la nulidad del proceso al presidente de la sala III de la Audiencia Provincial de Cádiz, Manuel Grosso, ha sido Felipe Meléndez, defensor del inspector médico Francisco Casto Lara, quien ha cuestionado la imparcialidad del juicio.

Meléndez ha considerado «de suma gravedad» que haya «dos grandes bloques» en el banquillo de los acusados, «los conformes, quienes se conforman con el relato de los hechos» y los «no conformes, que no están dispuestos a acogerse al escrito de calificaciones».

Además, este letrado ha pedido que se anulen las escuchas intervenidas durante la 'Operación Karlos' ante la «falta de control del juez de instrucción».

Por su parte, Francisco Baena Bocanegra, abogado de María José Campanario y su madre Remedios Torres, ha calificado el juicio como la «instrucción don teléfono» porque todo el caso «se ha montado a través de las escuchas».

Baena Bocanegra ha incidido en que «la verdad no se puede conseguir a cualquier precio» y que «las grabaciones no han hecho otra cosa que contaminar todo el procedimiento».

En cuanto a los pactos, ha afirmado que «no le preocupa», sobre todo después de haber escuchado a su cliente decir «somos inocentes, no pacto mi dignidad».

El resto de los abogados de la defensa se han adherido a las argumentaciones principales de los letrados Meléndez y Baena Bocanegra.

Los acusados, tras salir de la Audiencia Provincial sobre las ocho y media de la tarde, han sido abucheados por el público congregado en las inmediaciones del edificio judicial y han vuelto a proferir gritos de «ladrones».

El juicio se retomará mañana a las nueve y media de la mañana con las intervenciones del resto de los abogados de la defensa, acusación y fiscalía que abordarán las cuestiones previas.

La declaración de los procesados está prevista para los días 11, 12, 13, 17, 18 y 20 de mayo mientras que los testigos de cargo lo harán el 2 y 3 de junio.

La declaración de los testigos de la defensa está prevista para los días 7 y 8 de junio mientras que la de los peritos de las defensas lo harán el 9 y el 10 de junio.