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El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, pidió ayer al Gobierno y las autoridades judiciales de Venezuela que colaboren con la Justicia y la policía española de un manera «más intensa» y que se «investigue hasta el final» si han existido vínculos entre ETA y las FARC puesto que este asunto es «de una gravedad importante». Según dijo el ministro, «alguna relación ha habido» entre ambas organizaciones terroristas.
En declaraciones a TVE, Rubalcaba destacó que para continuar con las investigaciones sobre la presunta colaboración del Gobierno de Chávez con las organizaciones terroristas, según denunció el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, es necesaria «la colaboración de Venezuela con la Justicia española».
«Nosotros creemos que alguna vinculación ha habido, vamos a ver de qué magnitud, qué grado de vinculación y colaboración real entre unos y otros», destacó el titular de Interior, quien aseguró que las relaciones, «aunque sólo sean epistolares», han existido entre ambas organizaciones terroristas. Así, subrayó la necesidad de que se verifique si el Ejecutivo venezolano ha proporcionado «algún apoyo indirecto» o «alguna connivencia» a presuntos miembros de ETA.
Preguntado si Venezuela se ha negado a extraditar a España a algún miembro de la banda terrorista, el ministro contestó que sí se han producido sucesos de esa naturaleza. Argumentó que hace dos años España solicitó la entrega de algunos terroristas que fueron extraditados desde Francia hasta el país sudamericano en los años 80. «Pidieron la nacionalización venezolana y hubo un intento por parte del Gobierno venezolano de dársela, el Gobierno español protestó y aquello se paró», explicó.
«Pediría a Venezuela que colaborara más, pero alguna colaboración ha habido», afirmó Rubalcaba respecto a la lucha contra ETA, que extendió la petición de una mayor cooperación contra la banda terrorista hasta el «lugar más recóndito del mundo».
Preguntado si el Gobierno de Venezuela es permisivo contra ETA, dudó de que ese término sea el más adecuado al tiempo que prefirió ser «prudente» porque, como responsable del Interior, su obligación es solicitar la colaboración de «todo el mundo», lo cual es, a su juicio, «incompatible con decir según qué cosas de Venezuela». «Uno no puede pedir a un país que colabore y mientras colabora que mire a ver si voy a dar dos bofetadas».