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El paro sumó 82.132 desempleados más en febrero, aunque ese mes ha supuesto un punto de inflexión en los datos, según el Gobierno, ya que la afiliación a la Seguridad Social aumentó en 26.340 cotizantes tras seis meses consecutivos de caídas.
El Ministerio de Trabajo e Inmigración divulgó ayer los datos del paro registrado en los Servicios Públicos de Empleo, que subió por séptimo mes consecutivo hasta situar el total de parados en 4.130.625, mientras que la Seguridad Social sumó 17.572.351 cotizantes.
Para el Gobierno el aumento de afiliados y el menor crecimiento del paro respecto a hace un año son la «parte positiva» de los datos conocidos ayer, declaró el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho.
No obstante, el Ejecutivo prevé que no se producirá una contratación de forma continuada hasta septiembre u octubre, según el secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, quien aseguró que a pesar del aumento del paro, se crea empleo «todos los días» pero que «saldos positivos continuos» se esperan para los últimos meses de 2010.
También lo ratificó la secretaria general de Empleo, Maravillas Rojo, quien recordó que en febrero se suscribieron más de un millón de contratos de los que casi un 10% fueron indefinidos, «es decir, se crea empleo», pero menos de lo que sería necesario para compensar la subida del desempleo, explicó.
Servicios, a la cabeza
Casi el 55% de los parados del mes se concentró en el sector servicios, con 45.420 parados más; seguido del colectivo sin empleo anterior (con 14.810), la construcción (9.915), la agricultura (6.871) y la industria (5.116).
Entre las mujeres subió en 41.675, mientras que entre los hombres lo hizo en 40.457.
El paro también subió entre los menores de 25 años (en 18.297) y entre los mayores de esa edad (63.835) y afectó igualmente a los extranjeros, con 19.266 parados más en febrero y 603.719 en un año.
La portavoz del PP en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, dijo que los efectos de la desestacionalización convierten el pasado mes en «el segundo peor febrero de la historia» por lo que, dijo, se debería propiciar una «inflexión» en la gestión de Corbacho y su equipo, pues urgen respuestas.