La deportividad no sólo está en el interior: Smart Forfour Twinamic

Los cambios se han centrado en la estética, tanto interior como exterior, con detalles que le dan ese toque más deportivo y radical que los amantes de Brabus buscan al comprar un vehículo con este sello tan distintivo.
El aspecto exterior Brabus se distingue por disponer de faldón delantero, las taloneras, un discreto alerón, un difusor posterior en gris paladio y unas espectaculares llantas de perfil muy bajo.
El interior, por su parte, dispone también de elementos distintivos con estética deportiva, entre los que destacan los asientos deportivos de una sola pieza, el logo de Brabus en la palanca de la caja de cambios automática, salidas de aire y panel de instrumentos a juego, pedales, alfombrillas y freno de mano con el logo de BRABUS, umbrales de las puertas o cuenta-revoluciones combinado con un reloj analógico.

PROPULSOR

El preparador Brabus también ha recitificado el motor de 898 cc, y ha subido la potencia de 90 CV hasta los 109, pero en este caso nosotros probamos el modelo con el propulsor sin aumentar de potencia, 90 CV y cambio automático (Twinamic), que ya ayuda bastante al comportamiento dinámico de este vehículo.
La cifra de par es bastante buena, de 135 Nm, con lo que se aprecia bien en las prestaciones. El hecho de que esté turboalimentado se nota y se agradece, ya que le da un reprís del que carece la versión de 71 CV. Sin tener unas prestaciones espectaculares, de este vehículo con cambio Twinamic cabe destacar que cumple holgadamente en todos los aspectos importantes; la velocidad máxima del Forfour es de 165 Km/h y tarda 11,9 segundos para acelerar de 0 a 100 Km/h. En la recuperación, tarda un poquito para volver a subir de vueltas, pero después lo hace de manera clara y efectiva.
El consumo medio asignado por la marca de 4’2 litros dista poco de los 6 litros que hemos conseguido nosotros, aunque hay que decir que hemos hecho un trayecto sin tener muy en cuenta el tipo de conducción. Si se circula de forma eficiente el consumo se reduce notablemente.
En carretera el Forfour tiene un comportamiento muy estable y lleva un tarado de suspensión más bien equilibrado, con lo que no tiende a sobrevirar ni a subvirar en absoluto. Lo que sí se consigue es que los pasajeros viajen de forma cómoda. La dirección es bastante sensible, sin ser molesta, y el radio de giro es bastante reducido, lo que requiere un poco de práctica y facilita de forma clara los giros en cualquier situación, sobre todo a la hora de aparcar o de salir de un parking.

INTERIOR

El interior, además de elementos con estética deportiva Brabus, incluye algunos elementos comunes con los del nuevo Twingo, aunque siempre con un toque personal proporcionado por la marca alemana, sobre todo en los materiales, donde se combinan plásticos de calidad y telas de forma muy bien pensada.
La pantalla del marcador es de color, lo cual se agradece, aunque en el ordenador de a bordo se echa de menos la información de los Km restantes para tener que ir a repostar. La pantalla central situada en posición central es bastante práctica y sobresale, cosa que también ocurre en la mayoría de vehículos de la firma Mercedes.