OBITUARIO

Fallece el empresario Andreu Moyà, padre y mentor del extenista Carlos Moyà

Figura clave en la trayectoria del que fuera número uno del mundo, de su mano se inició en el deporte de la raqueta en el club Gran Playa

Carlos Moyà, junto a su madre, Pilar, y su padre Andreu, tras ser número uno del mundo en Miami | Foto: Joan Torres

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La sociedad mallorquina está de luto al conocer a lo largo de la jornada de este jueves el fallecimiento, a los 87 años y tras una larga enfermedad, de Andreu Moyà Rosselló, conocido empresario isleño y padre de una conocida familia en la que destacó la figura de su hijo Carlos, uno de los mejores deportistas y tenistas españoles de toda la historia. Casado con Pilar Llompart y padre de tres hijos (Andrés, Begoña y el citado Carlos), su figura trascendió a la primera línea de la actualidad a la par que los éxitos del campeón de Roland Garros en 1998, teniendo como gran hito la recordada final del Open de Australia de un año antes, que siguieron desde su domicilio palmesano acompañados por numerosos medios de comunicación.

De carácter afable y próximo, siempre atento con la prensa cuando se le requería, la figura de Andreu Moyà resulta impresdincible para entender la trayectoria de su hijo Carlos. De hecho, a los seis años se inició este último en el tenis al ver a su padre jugar sobre la tierra batida de las instalaciones del Gran Playa Tenis Club de la zona de la Platja de Palma, donde empezó a forjarse la leyenda de un deportista excepcional, guiado por la afición de sus padres, que acabó convirtiéndose en su profesión, ya que después de abandonar el circuito, pasó a ser entrenador de Rafael Nadal, persona y familia a la que estuvieron vinculados los Moyà, en especial en los inicios del 'manacorí', que tuvo en Carlos a un buen compañeros en sus inicios.

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Andreu Moyà, junto a su esposa Pilar, tras el nacimiento de uno de sus nietos. Foto: Julián Aguirre

Andreu y su esposa fueron testigos directos de algunos de los grandes momentos deportivos de su hijo, Carlos Moyà. Tanto en la victoria en Roland Garros (1998) como en la consecución del número uno del mundo, meses después (1999) en Miami, además del triunfo en la final de la Copa Davis de Sevilla (2004). De la misma manera que disfrutó de su presencia y de sus nietos e hijos de manera intensa, de la mano de su inseparable Pilar, padres orgullosos de una leyenda del tenis a quien le brindaron siempre su apoyo incondicional, ayudándole en el momento de volar a Barcelona para seguir con su formación y cumplir el sueño que Andreu vio hacerse realidad: ser el mejor tenista del mundo.

El velatorio de Andreu Moyà tendrá lugar este viernes, 6 de junio, de 16.00 a 20.00 horas en las instalaciones de Son Valentí, en Palma; por su parte, el funeral en su recuerdo está previsto para el próximo lunes, 9 de junio, a las 19.00 horas en la iglesia de Santa Eulalia.