Como si emergiera de las rocas y se elevara con la ayuda del salobre viento marino, Iberostar inaugura este jueves su nuevo estandarte en Mallorca: el Iberostar Selection Es Trenc, un hotel de lujo de once plantas enclavado en primera línea de mar en la Colònia de Sant Jordi, junto a la playa de Es Trenc y abrazado por el Parc Natural Maritomoterrestre EsTrenc-Salobrar de Campos. Más que una construcción, pretende ser una declaración de intenciones de piedra, cristal, madera y telas con alma mallorquina que denota un lujo tranquilo alejado de ostentaciones barrocas.
La apertura forma parte de la ambiciosa estrategia de reposicionamiento del Grupo Iberostar que cuenta con una inversión de 210 millones de euros en 2025 para reforzar su presencia en destinos clave como Mallorca, Fuerteventura, México o República Dominicana. Mallorca, epicentro emocional y estratégico de la familia Fluxà, suma con este nuevo alojamiento su decimosexto hotel que está llamado a ser uno de sus buques insignia en la isla.

El hotel ofrece 145 habitaciones y suites, todas con terraza y vistas frontales o laterales al mar. Además de una piscina principal, cuya forma recuerda a la del llaüt mallorquín, integrada en un solarium con vistas al Mediterráneo, cuenta en la azotea con una piscina infinity y un rooftop con vistas panorámicas a la Colònia de Sant Jordi. Ofrece area wellness y un gimnasio equipado con los últimos avances, además de sesiones de yoga y rutas guiadas de bicicleta.
Flor de sal
Pero más allá del lujo tangible, el alma del proyecto se condensa en una alianza cargada de simbolismo: Iberostar ha unido su camino al de la histórica Flor de Sal d’Es Trenc, integrando la esencia de las salinas mallorquinas no solo en la cocina del hotel, sino también en su estética, su propuesta de bienestar y su narrativa.

El restaurante Salivent ofrece una carta de proximidad donde el producto local se realza con matices salinos. En su Salt Bar, los cócteles se visten con toques minerales. En el spa, los tratamientos se inspiran en las propiedades terapéuticas de esta sal rica en magnesio, recolectada de forma artesanal por Flor de Sal d’Es Trenc desde hace más de seis décadas.
En línea con la visión sostenible de la cadena mallorquina, el Iberostar Selection Es Trenc funcionará íntegramente con energía renovable gracias a un sistema totalmente electrificado. Desde 2020, la cadena ha eliminado los plásticos de un solo uso y en este nuevo hotel se reforzará la lucha contra el desperdicio alimentario mediante la tecnología Winnow, que permitirá un control inteligente del consumo en cocinas.
Se fomenta también el consumo responsable de agua a través de fuentes filtradas y se priorizan el producto de proximidad y los proveedores locales bajo criterios de sostenibilidad, como Teixits Vicens, Poraxa o la propia Flor de Sal d’EsTrenc.

Desde que abrió sus puertas poco antes de Semana Santa, el hotel mantiene altas cotas de ocupación y las previsiones son al alza. Se alojan turistas preferentemente alemanes, británicos, españoles, suizos y austríacos. «Creemos que Iberostar Selection Es Trenc es una opción perfecta para aquellos huéspedes que buscan viajar de manera pausada para desconectar, pero también para aquellos que quieren redescubrir la Mallorca más auténtica», señala el director del hotel, David Gómez.
El Iberostar Selection Es Trenc ocupa un inmueble levantado el año 1962 que ha sido transformado «bajo los criterios de eficiencia, integración paisajística y rescate patrimonial», explica David Gómez. El proyecto ha contado con empresas locales especializadas, como Poraxa, se ha utilizado piedra de Santanyí y en el interior predominan el roble certificado, las fibras vegetales y los tejidos de lengua mallorquina elaborados por Teixits Vicens. La transformación ha permitido ganar espacio para las habitaciones, todas ellas más amplias y con vistas al mar.