MANIFESTACIÓN

Reclaman al TIB más buses para la protesta de la vivienda y turistificación

Los organizadores de la manifestación del 15 de junio incentivan el uso del transporte público y lanzan una campaña en redes

Manifestación de mayo de 2024 | Foto: Pere Bota

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Los organizadores de la protesta del próximo 15 de junio han solicitado a Transports de les Illes Balears (TIB) un aumento de frecuencias de los diferentes autobuses que pasan por distintos núcleos de la Part Forana ante la previsión de la llegada a Palma de un buen número de manifestantes.
Desde Contracimera y otros colectivos que forman parte de la organización están incentivando a la población, a través de las redes sociales, para que utilicen el transporte público como medio para acudir a la protesta. Así, están informando en sus perfiles de las frecuencias que deberán utilizar para llegar a Ciutat desde poblaciones como Sóller, Deià, Valldemossa, Esporles, Santa Ponça, Andratx, Santa Maria, Manacor, Alcúdia, Inca o Felanitx, entre otras poblaciones.

El objetivo es estar a las 18.00 horas en la Plaza España de Palma, desde donde partirá la manifestación cuyo lema es Pel dret a una vida digna, aturem la turistificació. Esta protesta forma parte de la movilización internacional organizada en el sur de Europa, en diferentes ciudades y destinos turísticos, cuyos residentes comparten y padecen los mismos problemas. La manifestación pretende llegar a las mismas cifras de 2024, cuando 15.000 personas, una cifra histórica, salieron a la calle para reclamar la bajada los precios de la vivienda y denunciar el exceso de turismo.

Un año después y con los mismos problemas que sacaron a la calle a miles de mallorquines, los organizadores de la protesta del próximo 15 de junio han lanzado una campaña para propagar la convocatoria. Así, a través de sus redes, Contracimera y SOS Residents proponen grabar un vídeo diciendo Jo hi aniré y publicarlo en las redes sociales con el hashtag #johianiré15J.

Por otro lado, desde Contracimera han hecho un llamamiento en las redes sociales para crear una caja de resistencia, en la que se recaudarían fondos para sufragar multas y sanciones derivadas de las acciones contra la turistificación.