Almendros en flor, un espectáculo universal dentro del invierno mallorquín

El manto blanco de estos árboles tan emblemáticos cubre buena parte de la Isla entre finales de enero y el mes de febrero y es un reclamo para turistas y residentes

Almendros en flor en la zona de Bunyola. | Foto: F.F.

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Es una imagen que forma parte del paisaje de Mallorca durante el invierno. El espectacular manto blanco que cubre ya los campos de muchas zonas rurales de la Isla lo dibujan los emblemáticos almendros en flor que deslumbran al paso de residentes y, especialmente, los turistas que no dejan pasar la ocasión de deternerse y fotografiar estos árboles que son parte indisoluble de la estampa de Mallorca en estas fechas.

Entre finales de enero y durante el mes de febrero -e incluso ya durante marzo y en los albores de la primavera-, los almendros en flor trazan la que muchos conocen como 'la nieve mallorquina', siendo además reclamo para numerosos artistas llamados por esta estampa tan llamativa y que deja en los días soleados de invierno imágenes más que sugerentes.

Este panorama se puede observar de forma especial en municipios y zonas en las que los almendros se multiplican y extienden a lo largo de incontables hectáreas de campo. Santa María, Bunyola, Marratxí, Sencelles, Felanitx, Inca, Llucmajor, Son Servera, Lloseta... muchos rincones de Mallorca se tiñen del blanco de la flor de almendro, fuente de inspiración incluso de perfumes.

Incluso se mezcla la estampa de la flor de los almendros con otro símbolo como el Tren de Sóller, que circula durante parte de su viaje rodeado de estos árboles, patrimonio también y parte indisoluble del paisaje invernal de Mallorca y un espectáculo universal, ya que estas fotografías dan la vuelta al mundo.