La consellera de Salud, Manuela García, ha calificado el anteproyecto de Ley del Nuevo Estatuto Marco que regirá las condiciones laborales de todo el personal del Sistema Nacional de Salud, como «un desprecio y un retroceso para los derechos de los facultativos».
García ha señalado este martes en el Parlament en una respuesta a la diputada de Vox María José Verdú, que la propuesta del Ministerio de Sanidad está «llena de ocurrencias» y ha mostrado su apoyo a los distintos colectivos y entidades médicas que rechazan el documento.
La consellera ha expresado que el Ministerio de Sanidad ha conseguido «algo que es muy difícil, poner absolutamente de acuerdo a toda la profesión médica» en su rechazo al borrador, aunque el punto de partida suponía alcanzar un acuerdo para reformar el estatuto marco vigente, que tiene 20 años.
«Así no conseguiremos atraer, ni captar, ni fidelizar profesionales», ha advertido García insistiendo en que la nueva regulación no protege a los profesionales ni al sistema sanitario.
Por otro lado, la consellera ha cuestionado a la ministra Mónica García por no confiar en la capacidad de los profesionales para compatibilizar su labor en el ámbito de la sanidad pública y privada, obligando a una exclusividad a los jefes de servicio.
También ha cuestionado la obligatoriedad de la dedicación exclusiva de cinco años a la sanidad pública por parte de los que finalizan el MIR y ha puesto como ejemplo que, este curso, Balears ha fidelizado a un 70% de los MIR «sin ningún tipo de obligatoriedad».
García ha aconsejado a la ministra que «cambie de verbos» porque «no se trata de obligar, prohibir o imponer sino de compartir, pactar, consensuar y compatibilizar».
Movilizaciones del colectivo
Por su parte, el sindicato médico Simebal continúa convocando asambleas en los hospitales públicos de las Islas para informar sobre el anteproyecto y las consecuencias laborales que podría traer consigo la aprobación de esta normativa. Este lunes le ha tocado el turno a Son Espases, dónde unos quinientos profesionales sanitarios abarrotaron el salón de actos.
Desde el Simebal insisten en que el alto nivel de participación que están registrando estas reuniones «pone de manifiesto la inquietud del colectivo ante su futuro y su presente, una realidad laboral que todos coinciden en describir como una realidad caracterizada por la sobrecarga de trabajo, condiciones precarias y el escaso reconocimiento a su labor».
Para los representantes del sindicato médico de las Islas se está reflejando el «hartazgo del colectivo». Recuerdan además que ya hay dos protestas convocadas, que se llevará a cabo de manera simultánea en todo el país para exigir la paralización de las medidas impulsadas por el Gobierno con esta propuesta de ley que regulará el futuro de la profesión médica.
La primera, el próximo 10 de febrero, en la que se producirán paros de media hora en las puertas de centros de salud y hospitales, de 11.00h a 11.30h. La segunda el 13 de febrero, a las puertas del Ministerio de Sanidad.
1 comentario
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Que no se establezca la exclusividad para trabajar en la sanidad pública, y se haga cumplir la misma (no como ha sucedido hasta ahora), sería un desprecio al derecho de los ciudadanos, que seguirían sin disfrutar de la sanidad pública que se merecen. Es obvio que cuanto peor funcione la sanidad pública, más consultas y seguros privados habrá.