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Las 19 nuevas viviendas protegidas de la calle Salvador Espriu 37, en el municipio de Palma,ya tienen inquilinos. A primera hora de este jueves la presidenta del Govern balear, Francina Armengol, ha entregado las llaves de estos pisos de alquiler social a 19 familias, junto con el conseller de Mobilitat i Habitatge, Josep Marí, la presidenta del Consell Insular, Catalina Cladera, y el alcalde de Palma, José Hila.

Se trata de la promoción situada en la calle Salvador Espriu 37, en el barrio del Amanecer construida en un suelo cedido por el Ajuntament de Palma. Armegol advirtió que estas viviendas «son excepcionales desde el punto de vista arquitectónico y excelentes desde el punto de vista de la economía circular y la eficiencia energética».

De estas 19 viviendas, dos son adaptadas. Ocho de estos pisos son de tres dormitorios, diez tienen dos habitaciones y una tiene un dormitorio. La promoción tiene un presupuesto de 3.431.075 euros (IVA excluido) y se trata de una de las promociones incluidas en el acuerdo con el Consell Insular de Mallorca para contribuir a la construcción de 410 viviendas de promoción pública en 14 municipios de la Isla, entre ellos Palma, por lo cual la institución insular ha aportado seis millones de euros. El edificio es de clase energética A.

En cuanto a los adjudicatarios de estas viviendas, son nueve familias monoparentales, cuatro parejas con hijos, una madre con un hijo y una persona mayor a cargo, así como tres personas solas. A todos ellos se les ha realizado una adecuación de la renta individualizada y en ningún caso lo que destinan a la vivienda y los gastos supera el 30 por ciento de sus ingresos.

Armengol señaló que «nunca se había invertido tanto dinero público como en los últimos ocho años y aseguro que el derecho a la vivienda se reconoce en la Constitución como un derecho rector, pero no como un derecho fundamental todavía. Y las administraciones públicas hemos de luchar para hacerlo posible y efectivo».

La presidenta del Govern advirtió que «no queremos viviendas de lujo, sino que las clases medias y trabajadoras puedan tener acceso a la vivienda. Ahora que la rueda está en marcha, muchos ayuntamientos se han puesto a planificar viviendas y así lo ha hecho el Ajuntament de Palma, que ha ofrecido suelo para viviendas públicas». Armengol dejó claro que «hay que garantizar el derecho a la vivienda y dejar atrás la estigmatización de las viviendas públicas. Estas promociones han ganado premios internacionales de arquitectura».

Por su parte, el alcalde de Palma, José Hila, señaló que «se están llevando a cabo ocho promociones más de vivienda protegida en el municipo y ya están pensadas las siguientes. Hay que conseguir que la máquina no se vuelva a parar. Desde lo público tenemos que dar viviendas de calidad a precios asequibles». El Consistorio palmesano había cedido el suelo para la construcción de estas 19 viviendas de Salvador Espriu 37, que luego ha desarrollado el Ibavi.

Por su parte, el conseller de Mobilitat i Habitatge, Josep Marí, señaló la apuesta del Govern por la vivienda pública, en unas Islas en las que «hay mucha tensión en las viviendas, viene mucha gente de fuera y hay poco espacio. Las viviendas de protección oficial deben ser públicas siempre, no pueden pasar al mercado libre. Y deben acceder a ellas personas que paguen niveles de renta adecuados a sus ingresos».

El Govern balear incorporará 1.286 viviendas de protección pública al parque de vivienda pública al finalizar esta legislatura. Esta cifra supone un incremento del 73,2 por ciento respecto a 2015. Así, el IBAVI gestionará 3.042 viviendas protegidas en régimen de alquiler en las Islas. De estas 1.286, 357 están en Palma, de las cuales 44 se han entregado y 215 están en construcción. A estas hay que añadir los 28 pisos adquiridos por el derecho de tanteo y retracto y a los 70 que están en presupuesto o en firma de convenio.