Meliá y Rafa Nadal han presentado este jueves la nueva cadena hotelera que tendrá 20 hoteles en los próximos cinco años. | Archivo

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El consejero delegado de Meliá, Gabriel Escarrer, y el tenista mallorquín Rafa Nadal han presentado este jueves por la mañana en Madrid una nueva marca hotelera llamada Zel, que estará inspirada en el estilo de vida mediterráneo. Según han explicado, el primer hotel Zel se abrirá en Mallorca en 2023 y está previsto que en cinco años ya tengan 20 hoteles repartidos por todo el mundo. En una primera fase, la marca apunta a crecer en destinos de la costa del Mediterráneo y capitales como Madrid, París y Londres.

Ante el anuncio de esta nueva cadena, algunos usuarios en las redes ya se han interesado por saber cómo se puede entrar a trabajar cuando se pongan en marcha los diferentes complejos hoteleros. La respuesta está en su propia página web. En ella hay un apartado donde preguntan si se quiere formar parte del equipo y «transportar la energía del mediterráneo alrededor el mundo». Para ello dan un correo electrónico (development@melia.com) donde el interesado puede aportar su currículum y las motivaciones que le llevan a querer formar parte del equipo.

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Esta misma semana la consultora internacional CBRE ha tasado en 4.641 millones de euros los activos en propiedad de Meliá Hotels International, lo que supone una revalorización del grupo hotelero del 5,8 % con respecto a 2018. Mayor incluso es el incremento del valor de sus habitaciones, que alcanza el 21,2 %; el informe sitúa el valor medio de cada habitación de la cadena mallorquina en 307.275 euros, el equivalente al precio actual de mercado de una vivienda de 90 metros cuadrados en Baleares. En 2018 el valor medio de las habitaciones se quedaba en los 253.588 euros.

Al valor total de los activos de Meliá, de 4.041 millones, se añaden 600 millones de euros por su participación en joint ventures o filiales conjuntas (asociaciones empresariales temporales). Esa revalorización al alza cobra una dimensión mayor si cabe teniendo en cuenta que se ha producido tras una reducción del número de activos por las ventas de hoteles realizadas desde 2018. Durante ese periodo, la cadena se desprendió de hoteles en propiedad por valor de 324 millones de euros (más otros 55 millones en activos de empresas conjuntas); mientras, las adquisiciones se situaron en los 188 millones de euros de coste.