Imagen de archivo de Antonio García de la Rosa. | Jaume Morey

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Se fue perdiendo el poeta,
En el crepúsculo incierto
Por sus mares de zafiro...

Son sus versos los que abren esta despedida, aprendiz de poeta como le gustaba definirse, abogado, andaluz de sangre y mallorquín de adopción, caballero del Santo Sepulcro, colaborador de Ultima Hora… Defensor de causas perdidas, orgulloso de los suyos. Se ha ido pisando rayos de luna y en silencio. Natural de Archidona (Málaga), donde nació en enero de 1933, se licenció en Derecho por la Universidad de Granada, trasladándose desde 1961 a Palma, desde donde desarrolló una amplia actividad literaria con numerosos recitales poéticos, dentro y fuera de Mallorca, así como con la publicación de obra tanto poética como en los géneros de drama y ensayo.

De la Rosa fue un auténtico dinamizador cultural que hermanó su Andalucía natal con Mallorca. Cabe señalar que en el año 2007 fue distinguido como Andaluz del Año por la Casa de Andalucía por su enorme labor.

Antonio era un caballero español a la antigua usanza, no dejaba a nadie indiferente. Con una prosa ágil y precisa, era capaz de escribir el artículo más certero y él poema más dulce. En la Agrupación Hispana de escritores fue secretario y todavía en muchos teatros de Mallorca se oye el eco de sus conferencias y presentaciones. Se fue mi maestro y mi amigo, el abogado sagaz, el conferenciante exquisito… No hay palabras cuando el corazón habla, quizás sus versos cobijen su memoria

Dejad al poeta, dejadle
Cuando beba estrellas y su sed no sacie
Cuando esté ausente
Perdido en si mismo y en sus soledades
Dejad al poeta…Dejadle

P.E.: El funeral está previsto que se anuncie en fechas próximas.