Jordi Mora (abajo en primer término) en la asamblea de PIMEM celebrada el pasado miércoles. | Redacción Local

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La expulsión de la asociación de comerciantes de Pimeco de la Patronal de la Pequeña y Mediana Empresa en Mallorca (PIMEM)podría acabar en los juzgados. La entidad que preside AntoniFuster espera a tener en sus manos la comunicación oficial de la desvinculación entre ambas entidades antes de emitir su opinión al respecto y emprender posibles acciones legales. Este último es un extremo que evaluarán los servicios jurídicos de Pimeco una vez se materialice formalmente la separación.

Así lo aseveró el propio Fuster  para insistir en que no podrá ahondar en el tema ni hacer valoraciones hasta que no tenga sobre la mesa la misiva de PIMEM comunicándole la decisión que la asamblea de la patronal tomó el pasado miércoles con el voto unánime de sus cerca de 150 asistentes. Eso sí, Fuster consideró que debería haber sido invitado al acto. «Lo normal es que nos hubieran invitado», afirma. Al no haber sido así «no puedo opinar sobre lo que ocurrió allí». Asimismo, el presidente de Pimeco explica que le han llegado diversas versiones, algunas de ellas contradictorias, sobre lo sucedido en la asamblea, de modo que, insiste, debe demorar su respuesta hasta la recepción del comunicado de PIMEM.

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Por otra parte, desde la patronal de las pymes, su propio presidente,Jordi Mora, alegó que al no estar al corriente de pago, Pimeco no tenía derecho a estar presente en la asamblea del miércoles. De hecho, explicó que entre los factores que llevaron a decidir la expulsión figuraba el hecho de que Pimeco no había pagado cuota alguna desde su adhesión a la patronal hace cuatro años y medio, en enero de 2018. Con todo, Mora confió en poder llegar a un entendimiento con Fuster y que todo el proceso pueda culminarse de manera amistosa y sin mayores problemas para ambas partes. Es más, deseó que en adelante se abran puentes para nuevos escenarios de cooperación. En todo caso, descartó que las posibles acciones legales de Pimeco puedan tener «viabilidad jurídica».

Aunque la asamblea aprobó la expulsión el miércoles, el Comité Ejecutivo de PIMEM ya había tomado meses atrás la decisión de desvincularse de Pimeco, concretamente en abril.    La expulsión    ha supuesto la confirmación definitiva de las malas relaciones que existían desde hace años entre ambas entidades, algo que empezó a hacerse evidente en septiembre del año pasado, cuando PIMEM creó su propia asociación dedicada al comercio, PIMEM-Comerç.

Duplicidad de asociaciones

El nuevo asociado nacía con más de 400 comercios y más de 200 socios en Mallorca. Lo más significativo, no obstante, era que su presentación allanaba el terreno para lo que estaba por venir. El solapamiento de dos asociaciones de comerciantes integradas en una misma patronal supuso la constatación del cisma que llevaba tiempo incubándose y que ahora ha acabado de salir a la luz. Para entonces, «ya nos habíamos dado cuenta de que la relación no acababa de funcionar», reconoció Mora. Miquel Àngel Mateu y Miquel Àngel Salvà, presidente y vicepresidente respectivamente de PIMEM-Comerç, serán los únicos representantes a partir de ahora del sector del comercio en la principal patronal de las pymes en Mallorca y Balears.

El apunte

Mora: «No ha funcionado y no es culpa de nadie, les deseo éxitos»

La comunicación oficial de la expulsión de Pimeco podría tardar varias semanas en producirse, según Jordi Mora, quien pese a la ruptura espera poder mantener una relación de cordialidad y cooperación entre ambas entidades a partir de ahora. Mora reconoce que la relación nunca funcionó, pero tiende la mano a Fuster para restañar heridas y construir de hoy en adelante una relación independiente pero más provechosa para ambos. «No ha funcionado y no es culpa de nadie: no hemos sabido llevarlo ni unos ni otros y lo que queremos es una desconexión amistosa», aseveró para añadir que «tengo un respeto máximo para Pimeco y les deseo muchos éxitos».

Punto de vista
Germà Ventayol

División

Germà Ventayol

Los empresarios de PIMEM y Pimeco no se entienden, probablemente porque sus estrategias, intereses y vinculaciones políticas no son coincidentes. Nada nuevo. Lo malo es que el asunto tenga que acabar en los tribunales, una manera de llevar hasta la agonía el conflicto sin que se sepan muy bien cuáles son los motivos. Lo suyo es que cada organización pueda actuar con libertad a partir de ahora, al fin y a la postre les une la voluntad del éxito empresarial.

Las claves
  1. PIMEM-Comerç nació «para ser referente»

    El manifiesto fundacional de la nueva asociación ya dejaba bien claro que se creaba por petición de socios «que quieren una sectorial más integrada y coordinada con PIMEM» y que su objetivo era «convertirse en el referente del sector comercial de Mallorca».

  2. La asamblea aprobó la entrada de cinco socios

    La asamblea de PIMEM celebrada el miércoles también aprobó la adhesión de cinco asociaciones, una de ellas la propia PIMEM-Comerç. Las otras cuatro entidades son la Associació Balear de Guies Turístics, Illescena, APAEMA y Gremi de Tintorers.

  3. Pimeco, en activo desde 1977

    La Asociación Empresarial del Pequeño y Mediano Comercio de Mallorca, histórica patronal del sector, se fundó en 1977, un año después que la otra gran patronal del comercio, Afedeco, integrada en la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB).