Pinos tumbados en la finca de Montblanc tras el gran temporal de noviembre de 2001 en Mallorca. | Archivo

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Baleares ha sufrido 12 temporales de viento que han producido daños significativos entre 2001 y 2021, cuatro de los cuales destacan por haber afectado a más de 500 hectáreas y son ahora analizados en la publicación Els temporals destructius als boscos de les Illes Balears. Editado por la Conselleria de Medio Ambiente y la UIB, el libro analiza los efectos de estos fenómenos sobre la masa forestal en los últimos veinte años, ha informado el departamento autonómico en un comunicado. En la publicación participan 15 autores que profundizan en el análisis geoambiental de los cuatro grandes temporales destructivos que han afectado gravemente los bosques insulares: el de Mallorca en 2001, el de Menorca en 2018, el de Ibiza de 2019 y el de la Serra de Tramuntana en Mallorca en 2020.

El estudio profundiza en los impactos ambientales que estas perturbaciones naturales han causado en los hábitats forestales, las causas meteorológicas y la respuesta de restauración ambiental por parte de la administración forestal. Los expertos abordan las herramientas a desarrollar en el actual contexto de cambio global, donde el efecto combinado entre el calentamiento global y los cambios drásticos de usos del suelo intensifican los efectos de fenómenos meteorológicos adversos. También analizan la experiencia adquirida en la gestión forestal tras los cuatro grandes temporales de viento sufridos y las medidas presentadas para la restauración forestal y su eficiencia, o cómo evitar la degradación y desertificación generando paisajes resilientes que ayuden a la mitigación del cambio climático, la purificación del agua o la protección del suelo ante la erosión.

El libro es fruto de la colaboración entre el Servicio de gestión forestal de la Conselleria y el equipo de Investigación en Hidrología y Ecogeomorfología en Ambientes Mediterráneos (MEDhYcon) de la UIB. Ese equipo de la UIB forma parte del Instituto de Investigación Agroambiental y Economía del Agua (Inagea, y tiene como objetivo profundizar en el conocimiento de las dinámicas de los ecosistemas y hábitats insulares después de un grave impacto como puede ser el de los temporales de viento. El mismo equipo técnico ya editó y coordinó en 2019 el libro La gestió forestal post-incendi forestal, que también tenía el objetivo de unificar esfuerzos en la toma de decisiones en la gestión de restauración de los hábitats forestales afectados. El conseller de Medio Ambiente, Miquel Mir, ha destacado la importancia de la transferencia de conocimiento científico, «sobre todo en una época en que los efectos de la emergencia climática marcan las políticas de gestión, también la forestal». Ha señalado la necesidad de «estar preparados tanto técnica como científicamente para fenómenos extremos como los temporales de viento, que cada vez serán más frecuentes en nuestro clima mediterráneo»