Representantes. De izquierda a derecha, Judith Requena, Margalida Cortés, Maria Eugènia Carandell, Carmen Planas, Francina Armengol, Patricia Gómez, María José Sastre, Pilar Roca y Silvia Montejano, en sa Llonja. Nueve mujeres que son líderes en sus respectivos campos y han plantado cara a la crisis del coronavirus. | M. À. Cañellas

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Incertidumbre, miedo, dudas y tristeza, pero también valentía, poder, responsabilidades y empatía. La pandemia ha sido todo un desafío para la sociedad, e incluso más para las mujeres que han estado al pie del cañón en representación de todo un territorio ante la evolución de la COVID-19, de la economía y el turismo, de la vigilancia y seguridad o de la protección de los más vulnerables de Baleares. Con motivo del Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo, Ultima Hora conmemora el papel predominante que han tenido las mujeres al frente de una crisis sanitaria que a día de hoy perdura.

Francina Armengol, presidenta del Govern
«Las muertes por COVID han sido una herida enorme que no se curará»

De todas las responsabilidades, la de una presidenta es, probablemente, la más difícil de asumir. La jefa del Ejecutivo, Francina Armengol, destaca que «las muertes de la COVID-19 han sido una herida enorme que no se curará nunca, se han tomado decisiones que eran, en sí, muy complicadas». Había que evaluar en cada momento la situación de los hospitales y, según como estaban, tomar decisiones y restricciones. Todo ello, con consecuencias «económicas, sociales o mentales para toda la población». Armengol ha aprendido cómo las personas son capaces de cuidarse a sí mismas en el peor de los escenarios. «Hemos vivido momentos muy dolorosos y a mí me ha tocado dirigir el Govern entre dificultades. Pero mis palabras son de agradecimiento por el apoyo de las instituciones, agentes sociales y económicos». Por el Día de la Mujer, la presidenta espera que «las próximas generaciones puedan romper las barreras que todavía quedan».

Patricia Gómez, consellera de Salut
«La recuperación de la pandemia en Baleares se ha conseguido entre todos»

Ha navegado entre tormenta y marea, pero si de algo presume la consellera de Salut, Patricia Gómez, es del «mejor equipo de España para hace frene a una pandemia. Todos hemos remado en la misma dirección, con una dedicación plena». Echando la vista atrás, en las vivencias de la consellera hay aprendizaje, pero también «decisiones muy cambiantes porque también lo era el virus. Hubo mucho desconocimiento, no sabíamos absolutamente nada de lo que pasaría y cómo tratarlo». Pero, dice, «se hizo con humildad y reconocimiento», Gómez destaca que «la gran recuperación de la pandemia en Baleares no se ha conseguido sola, sino en conjunto». Y agradece a su equipo, la mayoría mujeres, «que ha demostrado mucha fortaleza y valentía».

Maria Eugènia Carandell, directora asistencial ib-salut
«Fue una explosión de trabajo, organización y mucha coordinación»

«A nivel laboral, estos dos años han sido una paliza». Eugènia Carandell entró en la dirección asistencial del IB-Salut en julio de 2019 y a los pocos meses le tocó vivir una pandemia como nunca se ha visto. «Al principio se veía lejos pero vimos que se acercaba y empezamos a plantearnos cómo estructurar la respuesta. Fue una explosión de trabajo, organización, mucha coordinación y de poner en contacto a mucha gente», recuerda. De aquella primera ola destaca que llegó a tener 25 grupos de trabajo de Whatsapp simultáneos, la red social se convirtió en la mejor aliada. Ahora habla de esfuerzo y cansancio sin olvidar el reto y la satisfacción. La campaña de vacunación ha sido «vivir la solución principal a todos los problemas que tuvimos».

Carmen Planas, presidenta de la CAEB
«Las empresas de Baleares han demostrado una enorme responsabilidad»

La presidenta de la CAEB, Carmen Planas, ha estado al frente de las negociaciones con el Govern en representación de las patronales asociadas y se siente orgullosa «del trabajo que han hecho las empresas». Reconoce, ante todo, que «las empresas de Baleares han sido muy escrupulosas con las prioridades sanitarias y han demostrado una enorme responsabilidad». Le pesó el desconcierto de las primeras semanas pero «fuimos capaces de trabajar unidos en la elaboración de protocolos a aplicar en cada una de las empresas». De toda crisis, el aprendizaje que saca Carmen Planas es que «nuestra estructura económica se mantiene y son las empresas la que la definen».

Yolanda Martínez, directora del Ibsteam
«Cien centros pequeños fueron digitalizados con aulas virtuales»

Hace más de dos años, la Conselleria d’Educació creó el IBSTEAM, un servicio que se inició con la misión de impulsar el aprendizaje digital en los centros educativos de Baleares. La directora de este equipo, Yolanda Martínez, tuvo que ponerlo en marcha antes de tiempo por la pandemia, todo un reto para el sector educativo: «Llevábamos seis meses de funcionamiento y apareció la COVID-19, lo que nos obligó a hacer en otros seis meses lo que había que hacer en tres o cuatro años. Los centros nos pedían ayuda para digitalizar las aulas y crear nombres de usuario para los alumnos». Yolanda Martínez tuvo además que afrontar las adversidades. El 10 % de los alumnos no tenía acceso a dispositivos digitales. En un mes, cien centros de pequeño tamaño fueron digitalizados con correos electrónicos y aulas virtuales», recuerda.

María José Sastre, presidenta del Coiba
«Si se tomaran las decisiones en salud, la atención mejoraría más»

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Cuando se le pide qué ha supuesto laboralmente la pandemia, Maria José Sastre, presidenta del Col·legi d’Infermeria de les Illes Balears (COIBA) responde que «es una pregunta complicada», y lo dice porque ya son dos años. «Hemos pasado por muchas etapas, no siempre al mismo nivel». Recuerda aquel marzo de 2020 con tanto «miedo como motivación. A medida que ha pasado el tiempo y venía una ola tras otras te agotas, te encuentras más flojo, el estrés, la parte emocional te acusa». Sastre habla en nombre de todas las enfermeras cuando dice que están exhaustas y reflexiona sobre el sentimiento colectivo de no haber podido atender al resto de pacientes como se debe. «Necesitamos volver a los cuidados». Esa es, precisamente, la clave de su profesión, y por eso, para el 8M, Sastre, reivindica que haya más enfermeras en los puestos de gestión, «si hubiera una mirada global donde se toman las decisiones en salud mejoraría mucho la atención».

Silvia Montejano, secretaria general de la federación de servicios de CCOO
«Estoy orgullosa de la labor hecha para proteger a los trabajadores»

Silvia Montejano es la secretaria general de la Federación de Servicios de Comisiones Obreras en Baleares. Estuvo al lado de la hostelería y el comercio en los momentos más difíciles de la pandemia. De lo que se enorgullece es de «la labor que hemos hecho para proteger a nuestros trabajadores». Uno de sus principales papeles en la crisis fue velar por el fijo discontinuo «que se encontraba con las prestaciones agotadas». Ante una experiencia desconocida, Silvia rememora las dificultades del inicio «que nos obligó a dar un paso adelante para proteger el empleo de la comunidad».

Pilar Roca, bioquímica de la UIB
«Tenía que ayudar a la sociedad, mejoramos la protección de la máscara»

Pilar Roca es catedrática de Bioquímica y Biología Molecular e investigadora del Grup Multidisciplinar d’Oncologia Translacional de la UIB. Recuerda que «no me iba a quedar de brazos cruzados en el confinamiento. Tenía que ayudar de alguna manera a la sociedad, dar un paso adelante y lo hice a través de un proyecto compartido entre la UIB y el Hospital Comarcal de Inca». Empezó a buscar información «por si era viable modificar las mascarillas quirúrgicas con el fin de mejorar su capacidad de protección. Diseñamos unas mascarillas tratadas con disolución salina que permiten desactivar el virus», apunta. Con todo, defiende que «la pandemia nos lo ha puesto todo muy difícil y es como si hubiese robado al menos un año de nuestras vidas, un auténtico paréntesis».

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Mujeres en acción. En el centro, la Inspectora jefa del grupo segundo de la Unidad de Prevención y Reacción de la Policía Nacional, Lorena García, junto a sus otras compañeras, grupo que también ha vigilado y custodiado la llegada de las vacunas a las Islas. Foto: PERE BOTA

Lorena García, inspectora jefa de la UPR
«Nuestra labor fue de concienciar para que la gente se responsabilizara»

La Inspectora jefa del grupo segundo de la Unidad de Prevención y Reacción de la Policía Nacional, Lorena García, reconoce que la situación sanitaria ha marcado un cambio importante en su trabajo. «Nuestra labor ha sido de concienciación para que la gente se responsabilizara. Su papel ha sido más de concienciar que de sancionar, aunque en un proceso tan largo como el de la pandemia, en este colectivo también ha hecho mella el cansancio. Sin embargo el balance es muy positivo. De cara al 8M reivindica que en su colectivo «lo más importante es la eficiencia, la competencia y la capacidad» para poder dirigir un grupo. La mujer, señala, «está totalmente integrada en el cuerpo de seguridad y también de cara a la población».

Margalida Cortés, vocal de la organización Zaqueo
«Gracias a los voluntarios, pudimos dar de comer a los más necesitados»

La Organización Zaqueo experimentó unos años pandémicos inolvidables. De estar a disposición del sintecho, a cubrir las necesidades de otros colectivos y no tan vulnerables. Una de las vocales, Margalida Cortés, ha estado al frente de la tarea de servir comida a centenares de personas a diario. «En los picos más altos atendíamos a 250 personas al día, y en un día normal, a unas 220», cuando antes de la pandemia apenas llegaban a 90 personas diarias. Del trabajo hecho, Margalida Cortés destacaría que «gracias a los voluntarios y a la gente joven hemos podido dar de comer a los más necesitados». Junto a Catalina Cunill y otras vocales no han parado esta labor social, que ha ayudado a mucha gente a salir adelante. «Teníamos una gran diversidad de personas que lo pasaban mal y que con un plato caliente podían ahorrar algo para afrontar otros pagos», destaca.

Judith Requena, sargento en la 'operación Balmis'
«El papel de la mujer en el Ejército ha aumentado mucho con los años»

La sargento Judith Requena participó en la Operación Balmis, una misión del Ejército para hacer frente a la COVID-19. Realizaron desinfecciones en calles, residencias o colegios. Todo ello, Requena lo recuerda como «una experiencia inolvidable aunque estresante. La pandemia llegó de repente y nos tuvimos que poner manos a la obra». Sin embargo, se enorgullece de que todo el equipo «trabajó con esfuerzo y dedicación». Sobre el papel de la mujer, cree que «nuestra presencia ha ido en aumento durante todos estos años y se ha demostrado que podemos cumplir con cualquier misión que nos encomienden. Estamos integradas con los compañeros».

Ascen Maestre, SOS MAMÁS
«Pasamos de cubrir a 4.000 personas a casi 12.000 en la pandemia»

La Asociación SOS Mamás ha batido su récord. «Hemos pasado de dar cobertura a unas 4.000 personas hasta recibir a 12.000 durante la pandemia», expresa la presidenta de esta entidad, Ascen Maestre. Un reto que ella misma califica de «muy duro», cuya misión era «estar con la gente necesitada». Han pasado de ser una asociación para madres con niños pequeños sin recursos a ser «una entidad asistencial que da cobertura a muchos más colectivos vulnerables». A pesar de los triunfos y de llegar a los más necesitados, Maestre reconoce que «no ha sido fácil, porque para mí la asociación debía ser un entretenimiento, no un trabajo».