Parlament balear este martes. | Twitter: @ParlamentIB

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La consellera de Hacienda y Relaciones Exteriores, Rosario Sánchez, ha pedido este martes al PP que apoye los Presupuestos autonómicos de 2022 «si de verdad están preocupados por el futuro de las familias de Baleares». Así ha respondido Sánchez a una pregunta del diputado 'popular' Sebastià Sagreras, quien ha advertido de la subida «desorbitada» del coste de la vida, de los precios, «sobre todo en bienes de primera necesidad". Para la consellera, la subida de precios es un tema «temporal» que se debe «al cuello de botella en mercaderías, originado después de la pandemia de la COVID-19 y al incremento del precio del gas».

De este modo, ha negado la subida del IPC subyacente a los bienes de primera necesidad. En cualquier caso, ha precisado, «el Govern estará vigilante y tomará todas las medidas que sean necesarias para sostener a las rentas medias y bajas». Así, ha pedido al PP que «voten a favor del presupuesto del 2022 si realmente están preocupados por el futuro de las familias de esta CC.AA», porque es en estas cuentas donde, ha hecho hincapié, «as transferencias a familias aumentan en 77 millones de euros, hasta casi 700 millones, y en su conjunto las transferencias a familias, empresas y conciertos sociales y educativos aumentan hasta casi 1.000 millones de euros».

Pese a las palabras de la consellera, el 'popular' Sagreras, ha opinado que «es hora de que el Govern se empiece a dar cuenta de la realidad de los ciudadanos, que se tienen que enfrentar a un aumento desorbitado del coste de la vida, de los precios, sobre todo de los de primera necesidad». «Se trata de la mayor subida en 30 años, que perjudica a familias, por el aumento del precio de la luz, del alquiler, de la cesta de la compra y del gasoil; a payeses, por el aumento de los precios del pienso y de los fertilizantes; a constructores y promotores, por la subida de la madera; y, también, a los editores, por la subida del papel", ha asegurado. «Con Armengol y Sánchez todo sube», ha enfatizado, a la vez que ha pedido «más respeto para pymes y autónomos, que se levantan temprano para poner en marcha este país». «La inflación es el impuesto de los pobres, del que solo se beneficia el ejecutivo, porque si suben los precios también sube la recaudación a modos de impuestos», ha dicho, asimismo. Frente a toda esta situación, Sagreras ha propuesto una serie de medidas «reales y realistas» como que «se apruebe la parte fiscal del REB, se baje el tramo autonómico del IRPF y eliminen el impuesto de sucesiones».